El consejo nacional justicialista presidido por Carlos Menem alertó ayer que en el país se registra "una crisis de gobernabilidad que amenaza sumir a la Argentina en una situación semejante a la de julio de 1989", además de señalar que la Alianza "nunca constituyó una alternativa de gobierno", a pesar de ello, el peronismo se comprometió a "sostener la gobernabilidad", pero sin participar del gobierno.
"El país atraviesa hoy una crisis de gobernabilidad que amenaza sumir a la Argentina en una situación semejante a la de julio de 1989, cuando el peronismo se vio forzado a asumir la responsabilidad del gobierno con seis meses de antelación al plazo previsto", expresa el duro documento del consejo.
Hace hincapié en que "la crisis interna de la coalición oficialista constituye la penosa y definitiva comprobación de que la Alianza nunca constituyó una verdadera alternativa de gobierno" y se remarcó que "podía servir para ganar una elección, pero era y es estructuralmente incapaz de gobernar al país".
"El resultado de su efímera gestión constituye una gigantesca estafa moral a la esperanza de los argentinos", se indicó para reiterar que "el Partido Justicialista ayudará a sostener, como siempre, la gobernabilidad del país, pero lo hará sin participar del gobierno".
"Sólo a través de una estrategia de unidad nacional será posible evitar un colapso institucional", se aseveró en el documento rubricado por Menem.
Además, se puntualizó que "es imprescindible establecer un pacto de gobernabilidad que demanda un acuerdo entre el gobierno nacional y los provinciales".
Palos al Frepaso
En el documento más duro e importante de todos los que se emitieron en los 15 meses del mandato de Fernando de la Rúa, el cuerpo orgánico comandado por Menem dio el alerta del panorama en el país, fustigó con dureza a la Alianza y en especial al Frepaso, y emitió su visión sobre lo que debería hacerse para poder salir de la crisis.
La difusión del texto titulado "Primero la Argentina" se efectuó poco después de que en el Congreso los gobernadores y los bloques legislativos partidarios resolvieron ponerle freno a las aspiraciones del nuevo ministro de Economía, Domingo Cavallo, para recibir facultades especiales ya que concluyeron en que debe tratarse las leyes en el Parlamento (ver aparte).
Sobre la fuerza comandada por el ex vicepresidente Carlos Alvarez se subrayó que "la irresponsabilidad política exhibida por los máximos dirigentes del Frepaso los convierte en simples comentaristas quejosos de la realidad, porque carecen de inteligencia para comprenderla y de coraje para transformarla".
Los peronistas consideraron que "sólo a través de una estrategia de unidad nacional será posible evitar un colapso institucional" y advirtieron "con todas las letras: el actual presidente tiene que ejercer en plenitud las facultades correspondientes a su cargo hasta el último día de su mandato constitucional".