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 domingo, 05 de febrero de 2006  
Invasión de alacranes y pulgas en el hospital venadense

Venado Tuerto.- Un hecho inusual ocurrió en el hospital venadense Alejandro Gutiérrez al constatarse que habían ingresado a la sala de pediatría algunos alacranes que afortunadamente no llegaron a picar a ninguno de los niños internados. "De acuerdo a los especialistas fueron hallados dos tipos de ejemplares de los cuales uno es más peligroso por ser venenoso y el otro no", según reveló el director del efector público, Carlos Trongé.

El episodio se produjo la semana pasada donde también se registró un suceso no menos llamativo: los dormitorios para médicos fueron invadidos por pulgas. Es cierto que en esta época de calor las alimañas e insectos suelen aparecer con frecuencia en diferentes zonas pobladas, pero no es común que eso suceda en un centro de salud y mucho menos en un espacio destinado al cuidado de menores.

Consultado por este diario, Trongé calificó lo ocurrido como "un hecho menor" y aclaró que el nosocomio cuenta "con dosis de suero para atender a pacientes picados por alacranes", aunque aseguró que en lo que va del año "no se registró ningún caso".

Los alacranes entraron a la sala de pediatría desde un patio lindero y fueron descubiertos por médicos que se encontraban en el lugar. Claro que el episodio generó sorpresa, aunque no produjo mayores consecuencias. "Lo primero que hicimos fue evacuar la sala, especialmente porque se trataba de pacientes muy vulnerables como son los chicos. Después desinfectamos el lugar luego de trasladar a los pacientes a la zona de neonatología y maternidad", explicó Trongé.

"Como los alacranes son animales rastreros -agregó el profesional- seguramente ingresaron desde el patio lindero por las hendijas de las puertas. Ahora todo está bajo control aunque en ese momento fue un trastorno porque tuvimos que cerrar la sala y la gente tuvo que sufrir algunas incomodidades".

Pero los alacranes no fueron la única visita inesperada que recibió en los últimos días el hospital venadense. Si algo le faltaba para superar la capacidad de asombro también tuvo que soportar la presencia de pulgas. Los molestos bichitos ingresaron al dormitorio para médicos y no parece ser la primera vez. "No estaban en las salas de los pacientes sino en el dormitorio de los médicos, pero este es un caso más común y por supuesto menos peligroso que los alacranes", dijo Trongé.
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