Pepe conduce la albiceleste

Básquet: Juan Ignacio Sánchez analizó el presente del equipo argentino en el Mundial

El base bahiense demostró que además de tener conocimientos de básquet, se interesa por la cultura

Juan Ignacio Sánchez es uno de los jugadores más experimentados y líderes del equipo argentino, pero con profundos conocimientos de cualquier tema que se toque en una conversación, y que piensa que "no todo termina con el básquetbol", aunque es lo que eligió en su juventud "para poder vivir y trascender en el deporte".


La habitual zona mixta, instalada en el Sendai City Arena, fue el lugar elegido para hablar con el estratega del seleccionado argentino, que siempre tiene un concepto más sobre el básquetbol y en este caso sobre el seleccionado argentino que está participando del Mundial.
Cuando le tocó analizar lo hecho hasta aquí por el equipo, respondió con firmeza que se jugaron "tres partidos y se los ganaron, con un nivel de juego que va creciendo. Llegamos mal de la gira previa, porque fueron 40 horas de vuelo que complicaron la preparación. Pero ahora, el hecho de estar asentados varios días en un lugar hizo que todo cambiara".

Pepe aclaró que no está totalmente recuperado de la lumbalgia que lo afecto en la Copa Philips de Singapur. "Todavía no estoy al ciento por ciento, ya que me duele un poco, pero descansando bien y haciendo trabajos de recuperación cada día me siento mejor".

"Sería bueno llegar al choque con Serbia y Montenegro habiéndonos asegurado el primer lugar, pero si no es así tendremos que esforzarnos para superarlos. Este no es el mismo equipo de Atenas, ya que solamente queda Rakosevic. Pero no hay que tomar en cuenta la derrota en Singapur, ya que allí el técnico (Sergio) Hernández probó muchos jugadores y variantes. Y la verdad, a nosotros ese día tampoco nos salió una bien", apuntó.

"Acá siempre se habla de que somos candidatos al título, pero yo lo veo muy bien a España, que está consistente y fuerte, así como Estados Unidos, que se preparó muy bien, y a Grecia, que es el campeón europeo y trajo casi al mismo plantel. Claro que siempre puede haber una sorpresa como ocurre en cualquier torneo", indicó.

El bahiense no considera al enfrentamiento con Serbia y Montenegro un clásico, ya que se perdió la final de Indianápolis "por una falla arbitral. Y les ganamos en Atenas con el doble milagroso de Manu. Pero este es un equipo diferente y nosotros no tenemos ningún espíritu de revancha. Es un partido más que trataremos de ganar, siendo o no ya primeros en el grupo".

El base que hizo su carrera universitaria en Temple, Estados Unidos, donde se graduó de licenciado en historia, es un profundo amante de toda la cultura y el arte de los países que visita, aunque sobre Japón comentó que "nada" lo sorprendió demasiado.

"Esperaba que algo me deslumbrara pero no me pasó eso. Sí hay que rescatar la amabilidad, el trato y el respeto de la gente, algo que se debería imitar en Sudamérica", apuntó.

Al preguntarle como mataba el tiempo en la concentración, sostuvo que ve "muchas películas. Hablamos entre nosotros de cosas que no tienen que ver con el básquetbol, escuchamos música y leemos. Sendai es una ciudad en la que no hay mucho para ver. Por eso las horas no pasan nunca. Por eso hay que tratar de pasarla lo mejor posible".

Sánchez, uno de los históricos de la generación dorada del básquetbol argentino, el mejor asistidor del equipo, sueña con subir al podio porque "sería lindo seguir estando en los primeros lugares del básquetbol mundial".

Tiene la pelota. El bahiense demostró que sus pasiones van más allá del básquet.