| domingo, 26 de septiembre de 2004 | La nueva frontera de los fertilizantes Con el complejo portuario industrial de Ramallo, una inversión que en una primera etapa demandará 100 millones de dólares y que en su conjunto podría ampliarse a 300 millones, inaugura "una bifurcación del polo oleaginoso" que tiene centro en el Gran Rosario, posible ahora porque "en los últimos 5 ó 6 años la producción de la provincia de Buenos Aires adquirió un volumen suficiente como para no tener que subir a Santa Fe".
El presidente de Bunge, Raúl Padilla, señala que la nueva localización permitirá ahorrar costos en logística y transporte "que actualmente operan en detrimento de la rentabilidad del productor".
En su etapa inicial el proyecto contempla habilitación el año próximo de un un muelle de carga de granos y subproductos y otro de descarga de barcazas y fertilizantes.
"Estamos pensando para el año próximo mover 1,5 millón de toneladas de granos y en dos o tres años tendríamos que estar superando los 3,5 millones", agregó. El complejo contempla construir instalaciones de almacenaje de granos y fertilizantes, empezando con capacidades superiores a las 250 mil toneladas, para llegar al final del camino con 1,3 millones.
La compañía prevé concentrar en Ramallo las operaciones de fertilizantes, apuntando a un negocio que en Argentina podría duplicarse en los próximos años hasta llegar a un consumo anual de 4 millones de toneladas. En este rubro, Padilla señaló que "pensamos seguir creciendo, estamos evaluando dos o tres alternativas, incluyendo una inversión para una explosión minera en el sur", atada a la posibilidad de producir fertilizantes en el país. enviar nota por e-mail | | |