El Pepi cumplió y volvió para quedarse

Pumpido confió en él y cumplió dentro de sus posibilidades. Ariel Zapata regresó a la titularidad luego de seis meses y lo mejor que se llevó fue la conmovedora ovación de la tribuna. En la cancha, el Pepi mostró estar entero en la entrega, aunque aún con la lentitud lógica de la inactividad.

Pese a lo que podía suponerse, Zapata hizo mejor el segundo tiempo que el primero, demostrando una cualidad física envidiable. No sólo aguantó el trajín, sino que cuando pudo trabar generalmente ganó. Sólo quedaba expuesto cuando le tiraban larga la pelota, como Tuzzio en el primer tiempo, y jugó más encima de Ponzio que de Belluschi. Husain siempre apareció un paso más atrás que él.

Con Zapata, Pumpido volvió a tener a los dos "refuerzos" en cancha, como calificó al Pepi y a Spolli por su prolongada inactividad, aunque ahora perderá al Flaco, a quien le darán seguramente más de una fecha.

En cuanto a Marcos Flores, que jugó su segundo partido de titular en Newell's (el primero fue ante San Lorenzo, de carrilero derecho), se notó que le sienta más cómodo jugar en su posición natural de delantero. No tuvo posición fija en el frente de ataque, colaboró en la recuperación y asistió bien a Cardozo. Se ganó otra chance.