Dos tiros para el final de "Pelito"

Lo siguieron y lo asesinaron a balazos en las piernas la noche del viernes en Garay al 3100. Tenía 30 años y un prontuario abultado. Varios vecinos dijeron no lamentar su muerte

Leo Graciarena / La Capital

Cayó Pelito Bustos. La noticia congregaba en pequeños grupos a la gente en el barrio Carlos Casado. Fue el viernes por la noche en Garay al 3100. Los vecinos oyeron entre cuatro y cinco disparos y después gritos de dolor. Cuando salieron se toparon con Ariel Ulises Bustos, un muchacho de 30 años con antecedentes penales, que se desangraba en la calle.

Tenía un impacto de bala en el muslo derecho con entrada y salida, que le destrozó la arteria femoral, y otro en el muslo izquierdo. "Nadie quería tocarlo porque él había dicho que tenía sida. Cuando llegó la ambulancia, como a la media hora, ya estaba agonizando", explicó un vecino de la cuadra.

"No tenemos dudas de que fue un ajuste de cuentas. Ahora nos resta contestar de quién y por qué", deslizó ayer un pesquisa que trabaja en el asesinato del muchacho al que todos conocían como Pelito. La historia delictiva de Bustos, según el investigador, es extensa. En poco menos de diez años registraba 16 antecedentes penales. "Pelito antes vivía en el barrio, pero hace como 20 años el padre se los llevó a vivir al Fonavi de Amenábar y Ovidio Lagos. Ya tenía cansados a todos. Por ahí andaba con el fierro en la mano y falopeado. Era un loco peligroso", recordó un vecino veterano del Carlos Casado. Cerca suyo una doña sentenció la charla con desprecio y alivio. "¿Murió? Uno menos".


La huella
Una enorme mancha de sangre entre las numeraciones 3190 y 94 demarcaba donde Pelito Bustos pasó sus últimos minutos Justo debajo de un árbol que atenuaba la luz artificial Yo no vi nada Solo escuché los tiros que fueron cuatro o cinco Primero pensé que eran cuetes pero cuando escuché los quejidos del muchacho me metí en la pieza del fondo con mis hijos porque me dio miedo relató una joven que escuchó los pedidos de ayuda del muchacho asesinado Todo ocurrió pasadas las 23 Los vecinos de la cuadra coinciden con la chica en la secuencia de estampidos Primero tres disparos espaciados y luego dos juntos Después el relato de los habitantes de la barriada se iguala en un tajante Yo no vi nada


Sin congoja
Sin embargo algo más lejos del epicentro del ataque los vecinos se animaban con más datos Anoche Pelito andaba por Vera Mujica entre Garay y Deán Funes y parece que los de la cuadra lo corrieron a los tiros comentó un vecino A Pelito lo venían corriendo Por Vera Mujica le pegaron un tiro en la gamba Después lo alcanzaron donde cayó rememoró otro a su lado El vocero policial conjeturó que tal vez un solo proyectil pudo haber provocado las dos heridas El que le disparó no era muy avezado o le quiso dar un mensaje que le salió mal sostuvo el investigador

"Era lógico que Pelito terminara así. Ya no se aguantaba más", confiaba otro de los vecinos con muchos años en la zona, reproduciendo un recuerdo con términos llanos. "Hace un par de semanas andaba vendiendo celulares con el fierro encima. Te agarraba y te decía: «Necesito que me compres este celular porque me tengo que ir a Buenos Aires para que no me caguen a tiros». ¿Cómo te lo sacabas de encima? ¿Y si te pegaba un tiro porque no se lo comprabas?. Ya está. Ahora se terminó".

La cuadra de Garay al 3100, donde un tiro impactó en la arteria femoral de Ariel "Pelito" Bustos.