Para no caer en la trampa

Lo primero que tiene que hacer un paciente que concurre a un consultorio odontológico es comprobar la existencia del título habilitante, "que debe estar expuesto", recalcaron desde el Colegio que agrupa a estos profesionales. Si así y todo persisten dudas, las consultas pueden evacuarse en la entidad, donde además se cuenta con un servicio de conciliación para aquellos que resulten disconformes con prestaciones médicas.

En distintos barrios de la ciudad los vecinos se topan con cartelitos que proponen arreglos a bajo costo. Esos avisos deben ser ignorados y denunciados, porque se trata de mecánicos dentales no matriculados que fabrican implantes, realizan extracciones y otros trabajos sin ninguna supervisión profesional. Muchas veces trabajan en sitios escondidos en sus propios domicilios o en locales sórdidos y oscuros.

"Los mecánicos son meros auxiliares técnicos que no pueden desempeñarse en forma independiente, sino siempre a pedido de un dentista", insisten los dirigentes odontólogos. Además deben figurar en un padrón, según la normativa provincial al respecto.