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 domingo, 08 de octubre de 2006  
Gigli: "Me di cuenta de lo que era Newell's cuando me fui"
El delantero de Belgrano, que jugará por primera vez ante el club que lo vio nacer, dijo que si hace un gol no lo va a gritar

Javier Parenti / Ovación

"Será raro, no tengo dudas. Seguro me aparecerán recuerdos cuando vea que enfrente estará la camiseta de Newell's por primera vez. Por suerte tendré esta nueva chance de jugar en primera en el Coloso, ahora con 30 años y dándome cuenta de lo que significa esto, algo que uno aprende con el correr de la vida futbolística", confió Matías Gigli, hoy delantero de Belgrano.

"Hoy, a la distancia, me reprocho no haber disfrutado en plenitud aquel momento. Me di cuenta cuando me fui. Por suerte hoy en Belgrano vivo al máximo, soy feliz defendiendo esta camiseta y me quedaría para siempre en el Celeste, y en parte es así porque tengo contrato hasta junio de 2008", agregó Matías.

"Claro que tengo recuerdos imborrables, como el día que debuté en el banco de suplentes ante Unión (en el 97, ganamos 3 a 0), y eso que ni entré. Pisé la cancha casi llorando, mirando a la tribuna y Cristante (el arquero) me dijo «ya no sos más hincha»", precisó el delantero que llegó a Newell's de la mano de Lito Isabella para jugar en la 4ª de la AFA, procedente de Unión de Arroyo Seco.

"Otro momento bárbaro fue el clásico del 4-1, con goles de Real (2), Fernando Crosa y Saldaña. Ese partido fui titular, algo que no se dio muchas veces", explicó. "Mi único gol en Newell's fue ante Estudiantes, de cabeza tras un centro de Liendo, ganamos 3 a 0".

La falta de oportunidades lo hizo emigrar. "Primero fue en Argentino en la B Nacional, después me fui a Venezuela, Río Gallegos, y el Ruso Ribolzi me llevó a Godoy Cruz, donde empecé a levantar, fui goleador y me compró Belgrano. Y acá me quedaría a vivir. Hice goles clave, ascendimos, la gente es increíble, me pide autógrafos, me hace sentir bárbaro, juego y soy feliz".

Hay una regla no escrita y un temor de los clubes de origen cuando enfrente llega un ex jugador: sufrir un gol convertido por uno de ellos. "Ojalá convierta, porque hace un par de partidos que no lo hago. Pero de lo que estoy seguro es que no lo gritaría. Cómo hacerlo si Newell's me abrió las puertas del fútbol grande, si siempre fui hincha, como mi familia".
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