El cuerpo técnico de Central respaldó a Ledesma

Mauricio Tallone / La Capital

Pese al bajo rendimiento que mostró Damián Ledesma el domingo contra Lanús, su puesto en el mediocampo canalla no corre riesgo. Al menos, eso se desprende de las palabras que ayer entregó el ayudante de campo canalla Ariel Cuffaro Russo para explicar el bajón futbolístico que sufrió Chirola ante los granates.

"Al jugador hay que hacerle sentir que el técnico los apoya, pero dentro de los límites normales. Porque si el rendimiento es muy bajo, afuera hay compañeros que también quieren jugar y trabajan para ganarse el puesto. La idea es respetarle la titularidad a todos y bancarlos más allá de un mal partido", fue la lectura que deslizó Cuffaro para dejar bien claro que el desempeño del volante, por ahora, no es para alarmarse.

Igual, el cuerpo técnico canalla se mostró interesado en escarbar los motivos que empujaron al jugador a bajar notablemente su nivel. Por eso en la práctica del lunes, día elegido para la introspección y la autocrítica, Cuffaro llamó aparte a Chirola y juntos charlaron un buen rato mientras caminaban por los alrededores de una de las canchas de Palos Verdes. En ese momento, el tenor del diálogo no trascendió y los protagonistas guardaron puertas adentro lo que se dijeron.

Si bien Ledesma evitó dar detalles del encuentro, no tuvo reparos en reconocer que le costó retomar el ritmo futbolístico luego de los dos partidos en los que estuvo afuera, producto de la expulsión que sufrió ante Newell's, por la 2ª fecha del torneo.

"Soy consciente de que no jugué un buen partido contra Lanús. No busco excusas, pero tampoco creo que fui un desastre. Sentí el parate y jugué mal. No hay más explicaciones", dijo el Negro, que como insinuó la mano derecha de Zof no perderá su lugar entre los titulares.

Cuffaro también se mostró reticente en profundizar sobre las coordenadas en que se movió la el diálogo con Chirola. Pero ayer profundizó sobre el tema y envió un mensaje que habla por sí solo.

"El entrenador debe ser contemplativo con algunas situaciones que están afectando al jugador. A veces un futbolista tiene un inconveniente personal grave y cree que cuando entra a la cancha se lo saca de la cabeza, pero inconscientemente el problema sigue estando. Entonces eso lo afecta a la hora de jugar. Soy de los técnicos que bancan al jugador, pero si las malas actuaciones se repiten es lógico que corra el riesgo el puesto. A los muchachos siempre les digo lo mismo, las camisetas están colgadas y el que la agarra primero es el que se la queda. Con esto no quiero decir que Ledesma va a perder el puesto porque no jugó como lo venía haciendo. Al contrario, con el futbolista tenés que hablar, hacerle notar que no tuvo un buen partido pero siempre apoyarlo", sintetizó Cuffaro, quien jugó con la sensación de que si un jugador reincide en malas producciones no le templará el pulso para darle la oportunidad a otro.

Ledesma no perderá la titularidad.