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 domingo, 02 de diciembre de 2007  
Venezuela define hoy si elige el socialismo de Chávez
Va a referendo la nueva Constitución impulsada por el presidente, que le da enormes poderes

Caracas. — Venezuela va hoy a las urnas para votar un referendo sobre la nueva Constitución impulsada por el presidente Hugo Chávez. Decidirá así entre dos modelos de organización social y política, el “socialismo del siglo XXI” que promueve Chávez o la democracia representativa que defiende la oposición. Si bien los sondeos indicaban hace pocas semanas que podía vencer el “No”, las últimas encuestas señalan un posible empate técnico o un triunfo oficialista.

   En un ambiente de alta polarización política y social, los sondeos no han dado un claro favorito pese a que oficialismo y oposición ya claman victoria, acusándose mutuamente de que el bando contrario no reconocerá los resultados de hoy si no los favorecen.

   Los sondeos han mostrado una opinión pública volátil: desde una cómoda ventaja para el “Sí” que promueve Chávez al inicio de la campaña, a un repunte del “No” impulsado por protestas estudiantiles y algunas importantes deserciones en el chavismo. Sin embargo, la mayor parte de los estudios coincidieron en que los cambios propuestos por el chavismo a la Carta Magna, que incluyen la reelección indefinida y la ampliación de los poderes presidenciales, no son respaldados por la mayoría.

   Pero también fueron unánimes en señalar los altos niveles de popularidad que tiene Chávez, quien se ocupó de “dulcificar” su propuesta de reforma con la reducción de la jornada laboral a seis horas y un seguro social para trabajadores informales.

   A una semana del referendo, la mayor parte de los sondeos mostraba un empate, con una tendencia favorable al “No”. “El escenario entre los electores que están totalmente seguros de ir a votar (62%) apunta a una situación de empate, de no producirse un incremento de la participación (algo que favorecería al «No»)”, señaló la encuestadora Consultores 21 en su último estudio, que finalizó el 25 de noviembre pasado. Pero estos estudios no midieron la recta final de la campaña, en la que Chávez arreció con su estrategia de convertir el referendo en un plebiscito y recorrió el país con varios actos diarios televisados. Hoy pesará, además y como ya se vio en el acto de cierre del oficialismo el viernes, el enorme “aparato” que ha desarrollado Chávez desde el Estado.

   Sin embargo, el chavismo moderado, que apoya al presidente pero rechaza la reforma, duda si sufragar y por cuál opción decidirse, en caso de que finalmente vaya a las urnas. “El chavismo se atomizó frente a la propuesta. Lo que no se ha podido pronosticar, por atípico, es cómo votarán y si finalmente votarán estos «chavistas blandos» que suelen apoyar al presidente en las urnas”, consideró Luis Vicente León, director de la encuestadora Datanálisis. “Con este escenario y en torno a un 20% de indecisos, es imposible proyectar un resultado”, agregó León.

   Un sondeo que cubrió hasta el 27 de noviembre de la firma Consultores 30.11, empresa que pronosticó la aplastante mayoría con la que el presidente logró la reelección en diciembre de 2006, proyecta ahora una victoria del “Sí” con un margen de al menos 7%. Y fuentes del gobierno dijeron a la agencia británica Reuters que los sondeos que manejan dan una victoria a la reforma por 10 puntos “en el peor de los escenarios”.



Cambios polémicos. La reforma instala la reelección indefinida sólo para el presidente.Se eliminan los límites a la reelección presidencial y se extiende el período de gobierno de seis a siete años. Además, se reduce a 16 años la edad para votar, hoy de 18.

   La reforma da al presidente de la República el manejo de directo de las reservas internacionales. Desaparece la promoción de la iniciativa privada contemplada en la Carta Magna de 1999, promulgada por iniciativa del propio Chávez. Además, se elimina la propiedad intelectual que hoy protege obras científicas, literarias y artísticas.



Fin del federalismo. Otro aspecto cuestionado es que por decreto el presidente puede crear “ciudades comunales”, provincias federales, ciudades federales y distritos funcionales y designar sus autoridades. Hoy Venezuela es un país de régimen federal con Estados que cuentan con autoridades elegidas por sus ciudadanos. Así como podrá crear unidades territoriales el presidente también podrá suprimir las actuales.

   Pero el punto que ha causado más alarma internacional es la restricción de los derechos bajo el estado de excepción. Este podrá ser decretado por el presidente por tiempo indeterminado, y bajo su vigencia restringe el derecho a la información y permite al Ejecutivo detener a los ciudadanos sin causa judicial. Además elimina el requisito de que el decreto de estado de excepción del presidente sea revisado por el Tribunal Supremo de Justicia y que cumpla con el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la Convención Americana sobre Derechos Humanos.

   Fue por esto que la prestigiosa ONG Reporteros Sin Fronteras alertó que “el clima en que se ha desarrollado la campaña electoral y las odiosas agresiones a la prensa, constatadas en ambas partes, pueden servir de argumento para decretar el estado de excepción ilimitado y suspender algunas garantías constitucionales fundamentales, como el derecho a informar. La ratificación de esa reforma podría significar un giro peligroso para la libertad de prensa”.
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Una gigantografía de Chávez tapizada por el “No” opositor.

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