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domingo,
02 de
diciembre de
2007 |
Todos los días, una flor sobre la cómoda
Gracias a la repercusión de la historia de amor, Reinaldo recuperó sus lazos familiares y volvió a unirse con sus hermanos. Todos los días, antes de acostarse, coloca una flor al lado del cofre donde están las cenizas de Adelfa.
“La tengo arriba de la cómoda donde ella se pintaba y peinaba todos los días; está en un cofre de cristal con tapa de plata que era de sus padres. Todo lo que hago es por pedido de ella. Ahora quiero esparcir sus restos en Río de Janeiro”, dijo Reinaldo.
Reinaldo dijo que por ahora sólo piensa en el presente. “Quiero luchar por todo lo que Adelfa me dejó. Yo sé que ella quiere que todos sus bienes sean míos y que nadie se los quede; además, no hay ningún familiar que pueda reclamar nada así que sigo con los trámites correspondientes... cumplo con su deseo de quedarme con lo que me regaló”.
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