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domingo,
31 de
diciembre de
2006 |
Agradecimiento
a una residencia
Agradezco a la residencia para adultos mayores Cedro Real por las atenciones recibidas por las señoras Dalal y Soraya y por ende a sus queridos hijos David, Diego y Nélida. Es obvio que todos forman una gran familia basada también como dicen ellos en la sabiduría y sacrificio de sus antecesores. Los epítetos para calificarlos son respetuosos, cariñosos, amables, cálidos y tratan a los adultos mayores con excesivo amor. Este pequeño testimonio no hace mas que reafirmar mi gratitud a quienes me asistieron durante 40 días, con tanta dedicación y solidaridad. Agradezco también a Raúl Lucini (kinesiólogo) por las atenciones profesionales recibidas hasta el presente. Gracias por su humanidad.
Manuel Djoubaili, LE 6.020.367
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