Godoy Cruz tuvo al fin su alegría en el fútbol grande

Derrotó 3 a 1 a Independiente

Godoy Cruz salió de zapatero y justo ante el primer grande que enfrentó de local, en su estreno en primera división. Debieron pasar 10 fechas para que los tombinos saborearan su primer triunfo, ante un Independiente híbrido que cayó a sus pies ni bien Mauro Poy marcó el primero. Fue 3 a 1, fue fiesta para la multitud que copó el Malvinas Argentinas de Mendoza.

Poy, que salió de Central, giró en el punto del penal y sacó un zurdazo letal a los 38' para abrir el camino. Hernán Buján, un ex Tiro Federal, aprovechó dos pifias en el área roja, de Alvarez y Abraham, para ensanchar la diferencia. Y Diego Villar, ex Newell's, casi cayéndose, le metió alma y pierna a una gran habilitación del hijo de Aldo Pedro (otro error de Abraham) para sellar el triunfo. El descuento de Montenegro por un penal discutible a Ismael Sosa (en realidad fue de rebote), más la expulsión de Duarte, apenas maquillaron el resultado pese a los temores instalados de una recuperación roja que nunca llegó.

Hasta el gol de Poy, Independiente había insinuado más dentro de un partido parejo, pero después lo que dejó en claro el equipo de Burruchaga fueron sus tremendos desacoples defensivos, que propiciaron los otros dos goles tombinos y la cortina del partido, pese al descuento rojo.

El final fue un enloquecido festejo de los de Llop, que ahora ven con más optimismo su permanencia en primera, que es su objetivo. ¿El de Independiente? Lejos de lo que mostró ayer.