Chicas superpoderosas

El documental rosarino Femina habla de la singular relación entre el poder y las mujeres

Clarisa Ercolano / La Capital

Son tres hermanas, Sabrina, Florencia y Delfina Demirdjian, que se dedicaron a filmar un mini documental que plasma el nexo entre las mujeres y el poder. El tema interesó a este grupo de rosarinas que decidió, cámara en mano, salir a la búsqueda de congéneres que lo detentaran en cualquiera de sus manifestaciones. Así, entre la creatividad de una, la habilidad para los negocios de otra y la capacidad organizativa, parieron a "Femina, las mujeres y el poder", un documental que será presentado públicamente durante el transcurso de este mes.

"Nos interesó el poder como parte del camino a uno mismo. Descubrir mi poder, como descubrimiento propio, y no como lo que todo el mundo concibe como tal", reflexionó Delfina, responsable de entrevistar a 23 mujeres, anónimas y mediáticas, que dieron su visión del poder personal. "Es algo de cada uno, y a la vez una abstracción que cada uno piensa desde el punto de vista que quiere y que permite transformar cosas en uno y en el contexto", agregó.

En el documental, cada entrevistada plasma su forma de pensar el poder, y su responsabilidad y compromiso en el marco del lugar donde se desenvuelve, como parte integrante de la historia de la humanidad. "La relación que tienen los seres humanos con este concepto, como herramienta de transformación", señalan las realizadoras.

"Queríamos descubrirlas, escucharlas y ver qué pensaban estas mujeres de su poder. La pregunta fue común a todas y la idea era que cada una dijera lo primero que le venía a la cabeza, ya sea de manera conceptual o no", explica Delfina, antes de aclarar que intentaron que el abanico de invitadas fuera lo más amplio posible. "Tratamos de que fueran mujeres de la ciencia, empresarias, del arte, y no sólo de la política, que es lo que tiene mayor visibilidad".

El proceso de filmación tuvo una primera etapa donde se buscaron mujeres posibles de ser consultadas mediante reuniones de producción, concreción de los contactos y finalmente, las entrevistas en profundidad. "La convocatoria resultó buena y captó el interés". Sin embargo, hubo buenos y malos momentos. Paloma Herrera, por ejemplo, contestó a la brevedad el e-mail que le enviaron, e incluso, se hizo cargo de las llamadas teléfonicas desde Nueva York , su lugar de residencia.

Una decepción fue Nacha Guevara, mujer símbolo si las hay, pero que dijo que para responder quién era Nacha y su relación con el poder, necesitaba 20 años y no 20 minutos. "Fue una desilusión", cuentan las hermanas.

El vídeo ofrece algunos contrastes cuando, en las antípodas de la mujer que pacifica mediante el poder interior, aparece la figura de Condoleza Rice, consejera de seguridad del gobierno estadounidense. "Femenino viene de Femina, que quiere decir punta de pezón, que alimenta, por eso buscamos mujeres que fueran representativas en su ámbito, sin que necesariamente fueran mediáticas", resume Delfina.

El documental empezó a gestarse hace tres años con la idea de investigar sobre el tema. Con una betha cam en mano, apelaron a que las convocadas respondieran que sí desde lo afectivo. Comenzaron con la periodista Mónica Gutiérrez y siguieron con la actriz Eda Bustamante; esos fueron los primeros testimonios.

Después, la Universidad Nacional de Rosario sumó su apoyo al proyecto. De hecho, esta fue la primera producción audiovisual que la Universidad inaugura con un formato distinto y que presentará este mes para un público reducido.

Luego de una breve introducción, Femina abre sus imágenes con la mujer estandarte del poder femenino en el país, Eva Duarte. Luego las tomas hablan por sí solas: el poder de manejar el cuerpo y los movimientos; el poder político y sindical; para encarnar un personaje; manejar partículas diminutas con un microscopio; de captar para siempre un momento con una cámara de fotos; pelear por los hijos y por un mundo más equitativo y solidario.

"En definitiva, la idea es mostrar que ya no hay que seguir buscando líderes salvadores, sino que tenemos que hacernos cargo de la fuerza que cada una tiene en su interior y que nos permite iniciar los cambios", concluye Delfina.