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miércoles,
23 de
agosto de
2006 |
Abren procesos de desafuero
contra 67 diputados en Brasil
Brasilia. - La Cámara baja de Brasil abrió ayer los procesos de desafuero de 67 de los 69 diputados acusados de recibir sobornos de una empresa privada para desviar recursos presupuestarios para la compra de ambulancias a precios sobrevalorados. Entretanto, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, dijo estar seguro de que el pueblo lo absolverá por los errores que cometió su Partido de los Trabajadores (PT), en relación a una ola de denuncias de corrupción.
Dos de los 69 diputados acusados renunciaron a sus mandatos para eludir el proceso: Marcelino Fraga, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB, centrista), y Coriolano Sales, del Partido del Frente Liberal (PFL, conservador).
Ambos legisladores, así como otros 67 diputados y tres senadores, son acusados de formar parte de una red ilegal que recibía sobornos de una empresa fabricante de equipos médicos, para incluir en el presupuesto recursos para la compra de ambulancias para municipios a precios sobrevalorados.
Diez de los diputados acusados desistieron de buscar un nuevo mandato en las elecciones parlamentarias del 1º de octubre próximo, cuando más de 121 millones de brasileños elegirán además el presidente de la República, a gobernadores de los Estados federados y renovarán las Asambleas Legislativas provinciales.
Los demás legisladores acusados de formar parte de la llamada "mafia de las ambulancias" aguardan una decisión de la Justicia Electoral, que podrá negarles el derecho a disputar los comicios, ante las sospechas de corrupción que pesan en su contra.
Según la analista política Lucia Hipólito, los dos legisladores que renunciaron a sus cargos pretenden buscar un nuevo mandato en las próximas elecciones e intentar eludir el proceso de desafuero. Los diputados que sean hallados culpables serán despojados de su mandato y quedarán inhabilitados por ocho años para el ejercicio de cargos públicos.
"El pueblo me absolverá"
Lula, en campaña por la reelección, admitió ayer que "compañeros del PT cometieron errores, pero no puedo generalizar. Fidel Castro escribió que la historia un día lo absolverá. Yo no voy a precisar esperar por la historia: el pueblo me absolverá ahora", afirmó.
El mandatario se refirió así a la grave crisis política por denuncias de corrupción que enfrenta su gobierno desde hace dos años, pese a lo cual continúa al frente de las encuestas para las elecciones de octubre.
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