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 domingo, 23 de julio de 2006  
No cesa el fuego de Israel y crece el número de muertes

Beirut.- Israel realizó nuevos bombardeos en el Líbano y la guerrilla Hezbolá lanzó cohetes en Haifa, mientras un funcionario de alta jerarquía de Naciones Unidas (ONU) urgió un cese de la violencia y que se permita que la ayuda llegue a los desesperados civiles.

La secretaria de Estado estadounidense, Condoleezza Rice, quien partirá hacia Oriente Medio en el transcurso del día, dijo que buscará una solución duradera y no un cese al fuego inmediato. Washington culpa del conflicto a Hezbolá y a sus aliados Siria e Irán.

El ejército israelí dijo que aún no ha decidido si realizará una gran incursión por tierra en el Líbano, mientras que el ministro de Defensa, Amir Peretz, dijo que Israel aceptaría una nueva fuerza de paz liderada por la Otán en el sur libanés para controlar a Hezbolá.

Mientras tanto civiles sufrían nuevos bombardeos en una guerra que ha cobrado la vida de al menos 361 civiles en el Líbano y 37 en Israel. “Las escenas eran horribles. Había personas heridas en la calle y también en un edificio. Había una destrucción terrible”, dijo Keren Hagigi, empleado de una fábrica de una zona industrial de Haifa golpeada por los cohetes de Hezbolá.

Aviones de guerra israelíes bombardearon objetivos en Beirut y en el sur y este del Líbano, causando la muerte de al menos cinco civiles e hiriendo a unas 80 personas, en su mayoría en la ciudad portuaria de Tiro.

Media docena de explosiones resonaron en Beirut mientras jets sobrevolaban los suburbios del sur en las primeras horas de la mañana. Los ataques destruyeron un centro religioso shiíta en la localidad portuaria de Sidón, en el sur del país, hirieron a cuatro personas.

Doce bombardeos en el oriental Valle Bekaa destruyeron tres fábricas, una casa y varios puentes, lo cual ocasionó la muerte de al menos un civil y dejó heridos a otros siete. Otros dos civiles murieron en un ataque en un pueblo en el sur, dijeron fuentes de seguridad.

Dos personas murieron y otras 15 resultaron heridas cuando cohetes de Hezbolá impactaron en departamentos y vehículos en Haifa, la tercera ciudad más grande de Israel, 35 kilómetros al sur de la frontera.

Jan Egeland, coordinador de ayuda de emergencia de Naciones Unidas (ONU), dijo que la violencia debe cesar para que pueda entrar la ayuda humanitaria. “Estamos armando una importante operación de ayuda pero la violencia debe parar y el enorme bombardeo que hemos visto aquí con un bloque (de casas) tras otro siendo destruido tiene que detenerse”, dijo mientras recorría el distrito de Haret Hreik.

Egeland, quien estimó que se necesitan urgentemente 100 millones de dólares para enfrentar la crisis humanitaria en el Líbano, planea viajar a Israel el martes para negociar el establecimiento de corredores seguros por tierra, mar y aire para la ayuda internacional.

La guerra en el Líbano ha obligado a medio millón de personas a abandonar sus casas. Otros se escuentran atrapados en el conflicto, especialmente en las localidades fronterizas.

Más de mil cohetes de Hezbolá causaron la muerte de 17 civiles israelíes e impulsado a entre un tercio y la mitad de todos los residentes del norte del estado judío a escapar de los bombardeos, dijeron funcionarios.

Veinte soldados israelíes también murieron en el conflicto, que empezó cuando Hezbolá capturó a dos soldados y mató a otros ocho en una incursión transfronteriza, el pasado 12 de julio.

La radio del Ejército de Israel dijo que más soldados se movilizarían hacia el sur del Líbano para ampliar las operaciones por tierra contra Hezbolá cerca de la frontera. Pero el teniente general del Ejército, Dan Halutz, aún no ha decidido si lanzará una gran incursión por tierra.

Peretz dijo que Israel apoyará el despliegue de una fuerza de paz internacional temporal en el sur del Líbano, una idea descrita como prematura por el primer ministro, Ehud Olmert. “Ante la debilidad del ejército libanés apoyaremos una amplia fuerza multinacional”, dijo Peretz al ministro de Relaciones Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier.

Peretz no dio una fecha o cronograma para el despliegue, pero sugirió que fuese liderado por la Otán.

Enviados de tres países europeos sostendrán conversaciones en Israel más tarde antes de la llegada de Rice, en un refuerzo de los intentos diplomáticos por terminar los enfrentamientos.

Chipre se preparaba para recibir el domingo cerca de 10.000 refugiados más evacuado del Líbano.

Cerca de 14 barcos repletos tienen previsto arribar a los puertos chipriotas de Larnaca y Limassol en las próximas 30 horas, como parte de la evacuación masiva de ciudadanos de decenas de países. (Reuters)


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Un libanés reacciona al encontrar su casa en Beirut hecha escombros.

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