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domingo,
05 de
marzo de
2006 |
La Academia entrega sus premios Oscar esta noche en Los Angeles
Una fiesta que apuesta a sorprender con
menos brillo y propuestas arriesgadas
Los filmes en competencia son de bajo presupuesto y abordan temas urticantes para la actualidad
Rodolfo Bella / Escenario
La ceremonia de entrega de los premios Oscar que se realizará esta noche, tiene algunas singularidades que prometen ponerle sabor a un encuentro que en los últimos años corría por carriles más o menos conocidos. La fiesta será transmitida en vivo por la señal de cable TNT, y comenzará a las 20.30 con el desfile de estrellas por la alfombra roja y, a partir de las 22, se revelarán los nombres de los ganadores.
Entre las novedades figuran los temas que abordan las grandes favoritas y que pueden aparecer como una provocación: la irreverente mirada al western con una historia de amor homosexual de "Secreto en la montaña"; "Capote", sobre uno de los más célebres narradores estadounidenses, también declarado homosexual, y que como efecto colateral recuerda un tema urticante como la pena de muerte; la polémica que instala "Munich" por el enfoque de Steven Spielberg sobre el conflicto entre israelíes y palestinos; la persecución ideológica en la época del maccarthismo en "Buenas noches y buena suerte", y las tensiones raciales y sociales en "Vidas cruzadas", segundo filme de George Clooney.
Clooney es uno de los actores que, si el gusto de los miembros del jurado lo acompaña, puede subir varias veces al estrado a recoger estatuillas: está nominado como mejor director por su película "Buenas noches y buena suerte", y el filme también aspira a llevarse los premios de las categorías mejor película, guión original -del cual Clooney es coautor-, además de fotografía y dirección artística. Por otra parte, el intérprete está nominado como mejor actor de reparto por "Syriana".
"Buenas noches y buena suerte", que contó con un presupuesto de 7,5 millones de dólares, es el segundo filme que dirige Clooney después de "Confesiones de una mente peligrosa". Tanto en la película que este año compiten por el Oscar, como en "Syriana", los roles del intérprete tienen un cierto nivel de compromiso. Mientras en el primero se revisa la memoria de la censura durante la Guerra Fría, en "Syriana", el tema es la revisión de la política estadounidense en Medio Oriente durante los últimos cincuenta años.
"Secreto en la montaña", además del rubro mejor película, está nominado en la categoría mejor director, una responsabilidad que corrió por cuenta de Ang Lee. Tal vez el hecho más extraordinario sea que un director de origen taiwanés, aunque radicado en Estados Unidos desde 1978, sea el que se haya dedicado a hurgar en un tema nunca antes abordado de forma tan directa por la industria.
Lee recibió el Oscar en el 2000 por "El tigre y el dragón" y con "Secreto en la montaña" es la segunda vez que aborda el tema de la homosexualidad, después de "El banquete de boda", de 1992, en tanto que se propone continuarlo en su próxima película sobre la cantante Dusty Springfield y que sería protagonizada por Kate Moss y Charlize Theron.
El filme, con un presupuesto de 14 millones de dólares, acumuló premios en todos los festivales que se presentó e inclusive recogió aquellos que se consideran como un indicador de quién será el gran ganador de los Oscar. Entre otros, ya tiene cuatro premios Bafta, considerados el Oscar británico (mejor director, película, guión adaptado y actor secundario).
"Capote" llegó a la recta final con cinco candidaturas en los rubros más importantes: mejor película, director (el debutante Benett Miller), actor protagónico (Philip Seymour Hoffman), actriz de reparto (Catherine Keener) y guión adaptado. El filme fue el gran salto para Hoffman que siempre se destacó como un intérprete sutil en roles arriesgados, y que en este caso tuvo un personaje a la medida de sus posibilidades.
La película acompaña los desafíos morales a los que se somete el personaje de Truman Capote, interpretado por Hoffman, durante la investigación que el escritor realizó para escribir su libro "A sangre fría", sobre dos asesinos que mataron a los cuatro miembros de una familia y fueron condenados a morir en la horca. Aunque Hoffman comenzó su carrera hace diez años, hace poco tiempo se transformó en una figura conocida, pero en roles secundarios. Entre otras producciones apareció en "Magnolia", "El talento de Mr. Ripley", "Magnolia", "Casi famosos" y "Felicidad".
Por su labor Hoffman recibió premios de la Asociación Nacional de Críticos y también se llevó un Bafta a mejor actor protagónico, y de la Asociación de Críticos de Medios Audiovisuales. También obtuvo el Globo de Oro a mejor actor dramático, uno de los galardones que se consideran como un indicador previo a los Oscar. El filme, que costó sólo siete millones de dólares y se rodó en 36 días, ganó también los premios de las asociaciones de críticos de Los Angeles, Nueva York, Boston, Chicago, Dallas, entre muchos otros.
"Vidas cruzadas" compite en las categorías mejor película, guión original, actor de reparto, montaje y canción, además de director para Paul Haggis, quien aunque tiene antecedentes como guionista de televisión, tuvo su primer acercamiento al cine cuando se hizo responsable del guión de "Million Dollar Baby". La idea surgió cuando al director le robaron el auto, mientras le apuntaban con un arma a la cabeza. Haggis comenzó a pensar en cómo serían las vidas de los ladrones y la de los personajes que en algún momento se cruzarían en sus caminos. El filme, que costó 6,5 millones de dólares, ganó dos premios Bafta otorgados a guión original y actriz de reparto para Thandie Newton, entre otros otorgados por asociaciones de críticos y guionistas de Estados Unidos.
El filme más caro de los que aspiran al premio mayor, "Munich" contó con 74 millones de dólares para su rodaje, una cifra insignificante para los presupuestos que suele manejar el director Steven Spielberg.
Otra de las curiosidades, es la elección del animador Jon Stewart. El humorista es el protagonista desde 1999 de "The Daily Show", una popular parodia de noticiero que va por una señal cable en el cual el centro de sus bromas son los políticos estadounidenses, y en el que en particular se ensaña con el presidente George Bush y los miembros de su gabinete, en un momento en que la guerra de Irak está empujando al mandatario a niveles popularidad cada vez más bajos. Esta noche Stewart tendrá que poner a prueba su corrección antes de hacer la broma acertada sobre películas que en general rozan la actualidad por distintos flancos.
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Fotos
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Hoy, a partir de las 22, las estatuillas comenzarán a tener su noche de protagonismo.
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