Año CXXXVII Nº 49040
La Ciudad
Política
Información Gral
Opinión
El Mundo
La Región
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Turismo
Mujer
Economía
Escenario
Señales


suplementos
ediciones anteriores
Turismo 26/02
Mujer 26/02
Economía 26/02
Señales 26/02
Estilo 18/02

contacto

servicios
Institucional


 domingo, 05 de marzo de 2006  
El nuevo debate: ¿se atreverán a coronar hoy la temática gay?

En Los Angeles circulan rumores políticamente incorrectos: algunos miembros de la Academia de los Oscar se habrían negado a ver la película favorita de la crítica, "Secreto en la montaña", por sentir rechazo por la historia del trágico amor entre dos hombres. Y esto a pesar de que el filme no contiene escenas de sexo e incluso fue juzgado por algunos como "demasiado cauto".

Pero la aparentemente tan liberal industria del cine no logra desprenderse de la acusación de homofobia. Justamente este año han sido nominadas muchas películas con temáticas homo o transexuales, lo que ha encendido las polémicas.

"Secreto en la montaña", la película de Ang Lee que acumula ocho nominaciones a los Oscar, narra desde la óptica del western la historia de dos hombres que se aman, pero que sólo pueden encontrarse esporádicamente en la soledad de una montaña. Es una trama cargada de duelo por una felicidad no vivida.

El escritor Truman Capote aparece caracterizado abiertamente como homosexual en el drama "Capote" (5 nominaciones). Y el protagonista de la road-movie "Transamerica" desea más que nada poder convertirse finalmente en mujer.

Heath Ledger y Jake Gyllenhall ("Secreto en la montaña"), Philip Seymour Hoffmann ("Capote") y Felicity Huffman ("Transamerica") suman cuatro nominaciones al Oscar para actores que interpretan papeles de homosexuales o transexuales.

Asociaciones estadounidenses de homosexuales saludaron las nominaciones como un "hito" y esperan que deriven en una mayor aceptación de la diversidad sexual por parte de la población. Estas películas dan "a millones de estadounidenstes una gran comprensión sobre quiénes somos", afirma una declaración pública.

Pero también hubo voces críticas que se hicieron oír rápidamente. "¿Es la homosexualidad la nueva enfermedad de la semana?", preguntó la columnista Stacy Jenel Smith, quien equiparó la labor de las estrellas de cine que interpretan personajes homosexuales con la de los actores que personifican a autistas, lisiados o simplemente figuras horribles.

El valor de atreverse a la fealdad, el sobrepeso, la desviación de la imagen es muchas veces premiado, pero sólo cuando se aleja de la realidad. Pero de normalidad sólo se podría hablar si tanto la orientación sexual de un personaje cinematográfico como la de su intérprete carecen de significación, argumenta Smith.

Los medios estadounidenses pusieron en evidencia que su manejo de la homosexualidad dista de ser tranquilo. Cada vez que aparecen ante la prensa los "cowboys que se besan", Ledger y Gyllenhall, les preguntan cómo fue la experiencia de hacerlo ante las cámaras.

Ledger, cansado de lo reiterativo de la inquisitoria, dijo en una entrevista: "Usamos dobles de riesgo para las escenas amorosas." A fin de evitar la fuga de admiradoras juveniles, tanto él, a quien se puede ver actualmente también en el papel opuesto protagonizando "Casanova", como Gyllenhall, subrayan sin pausa su orientación heterosexual, evidenciada por otra parte por estar cada uno de ellos ligado en pareja a una célebre colega.

En vistas de este debate algunos dudan de que la Academia se atreva finalmente a coronar en el panteón del Oscar con "Secreto en la montaña" al primer romance gay. Muchos conocedores de Hollywood piensan que la consagración de "Vidas cruzadas", un drama sin complicaciones sexuales, podría ser una salida al dilema.

El periódico LA Weekly ya agregó a las categorías de nominados la de "mejor montón de hipócritas". Y en la televisión abundan las sátiras: David Letterman puso a su público en clima de Oscar presentándole la parodia de musical "Oklahomo".
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo


cartelera
Notas Relacionadas
Una fiesta que apuesta a sorprender con menos brillo y propuestas arriesgadas



  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados