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 viernes, 05 de octubre de 2007  
Policía a juicio oral por un homicidio
Es Claudio Blaser, acusado de matar a un hombre en un oscuro operativo en la ciudad de Córdoba

El subcomisario santafesino Claudio Carlos Blaser, acusado de matar a balazos a Víctor Moyano en un oscuro procedimiento policial realizado hace cuatro meses en Córdoba, seguirá preso en esa ciudad hasta el juicio oral y público. Así lo resolvió la Justicia mediterránea al desestimar un pedido de excarcelación presentado por la defensa del uniformado, que apeló la resolución. El policía está imputado de homicidio agravado en una causa en la que se deberá determinar si se excedió en el uso de la fuerza o hubo una acción de legítima defensa.

   El juez Esteban Díaz desestimó en las últimas horas el pedido de excarcelación presentado por el defensor de Blaser, Facundo Trotta. La medida fue apelada por la defensa y elevada a la Cámara de Acusación. “El magistrado de garantía de Córdoba descartó el pedido acogiéndose a la teoría de la fiscalía. El juez entiende que para nada hubo legítima defensa”, explicó una fuente tribunalicia.



El procedimiento. Hasta el 31 de mayo a las 7 de la mañana, Blaser estaba a cargo de la comisaría de Villa Cañás, en el departamento General López. Ese día, junto al oficial subayudante Damián Hugo Hoppeler y cuatro efectivos de la policía cordobesa llegaron hasta una casa de Cochabamba 2715, en el cordobés barrio Pueyrredón, para cumplir una orden de allanamiento del juez de Instrucción de Venado Tuerto. De civil, iban tras los pasos de Víctor Juan Moyano, un hombre sin antecedentes penales en Córdoba aunque sospechoso de tres robos en Villa Cañás.

   Tras un confuso procedimiento, Moyano, un ex futbolista de Instituto y por entonces empleado de un supermercado, fue acribillado en su Fiat Duna. Del diálogo con las partes del caso queda claro que sobre el homicidio de Moyano no hay posiciones intermedias. Se trató de una ejecución, como sostiene la acusación, o Blaser disparó actuando en legítima defensa al querer cubrirse de una posible agresión.

   Según fuentes tribunalicias, varios testigos, entre los que había vecinos y familiares de la víctima, dijeron ver cómo Blaser ejecutó a Moyano sin que mediara peligro para el policía. Además, denunciaron que plantaron un arma junto al cadáver. Basado en eso y en otras pruebas colectadas, el fiscal Marcelo Hidalgo imputó al subcomisario de homicidio agravado. “Existe evidencia clara de que en este caso hubo un homicidio sin justificación”, explicó una alta fuente tribunalicia cordobesa.

   Para la defensa del policía la visión es distinta. “Entendemos que hubo legitima defensa en el accionar de Blaser. Disparó para evitar una agresión dirigida en su contra. Fue una acción defensiva. Además, dentro del auto se halló un arma de fuego”, explicó el abogado. l
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