Agravios racistas contra Evo Morales

La Paz. — Luego de violentas protestas en Sucre que impidieron ayer la reapertura de la Asamblea Constituyente, el presidente de Bolivia, Evo Morales, denunció que en dos capitales del interior del país están circulando panfletos con el título “Plan para tumbar (derrocar) al indio de mierda”. “He visto esos panfletos en Santa Cruz y en Sucre”, dijo el mandatario.

Sucre y Santa Cruz de la Sierra son las capitales de Chuquisaca y Santa Cruz, dos de los departamentos donde se nuclea la oposición más firme al gobierno de Morales. El mandatario agregó que no es la primera vez que sufre agravios racistas.

Tensión en Sucre. Precisamente ayer en Sucre, una nueva ola de protestas y la amenaza de choques entre estudiantes y campesinos en la ciudad sureña de Sucre impidieron la reapertura de la paralizada asamblea constituyente.

Dirigentes cívicos y estudiantiles de Sucre —movilizados por una demanda de traslado de la sede del gobierno nacional desde La Paz hasta esa ciudad— cercaron la sede de la asamblea y dijeron que bloquearán las deliberaciones si el tema de la “capital” del país no se incluye en el debate constitucional. La asamblea, que funciona en la ciudad sureña desde hace poco más de un año y tiene plazo hasta diciembre para completar su trabajo, está paralizada desde el 15 de agosto, cuando resolvió retirar de su agenda el tema de la sede gubernamental.

La reapertura de sesiones constituyentes anunciada para ayer fue suspendida a último momento, después de que estudiantes de la universidad pública de Sucre intentaran tomar la sede de la asamblea.

Aunque Sucre es la capital de Bolivia, la legislación dispone que La Paz debe albergar al Poder Ejecutivo y al Legislativo, lo que siempre enardeció a los sucreños. El gobierno, que ha evitado hasta ahora pronunciarse a favor de una u otra ciudad, ha denunciado que la demanda de Sucre era utilizada por la derecha opositora.