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 miércoles, 30 de marzo de 2005  
Un renovado Hernán Crespo es la principal arma ofensiva de Pekerman

El delantero de Milan de Italia, Hernán Crespo, quien se mostró muy feliz por su presente futbolístico que lo tiene como figura en Europa y goleador del seleccionado argentino, aseguró que esto es "fruto de un gran esfuerzo, porque me maté en cada práctica para vivir este momento".

"Estoy muy feliz por estar bien de nuevo. Tuve un año y medio de lesiones que no me dejaban trabajar y jugar con normalidad, pero ahora las cosas cambiaron. Todo esto es fruto de un gran esfuerzo porque me maté en cada práctica para vivir este momento", afirmó Crespo, quien con cuatro goles es el goleador argentino en estas eliminatorias sudamericanas para Alemania 2006.

El ex River tenía todo para tomar el lugar dejado por Gabriel Batistuta, máximo goleador de la historia del seleccionado argentino con 56 goles, pero las lesiones y, a partir de eso, su flojo rendimiento, hicieron que llegaran los cuestionamientos a su persona.

"Lo que quería era estar bien físicamente. Lamentablemente en un año y medio tuve pequeños problemas, que luego se convirtieron en un gran problema. No podía entrenar con normalidad y no tenía continuidad. La pasé muy mal, pero ahora la mano cambió. Nadie te regala nada y por eso gozo en este momento", puntualizó.

Crespo se mostró agradecido al cuerpo médico de Milan, porque "me ayudó mucho. Tener a disposición a un grupo de profesionales de altísimo nivel fue una bendición", precisó.

Además, el delantero reveló que habló tanto con el cuerpo técnico de Milan como el del seleccionado argentino y ambos entendieron que para llegar a este gran presente necesitaba tiempo.

"Los dos cuerpos técnicos entendieron mis dificultades. No me apuraron y entendieron que yo quería jugar toda la temporada y no solo un partido. Por eso a mitad de noviembre se empezó a ver el fruto del trabajo. Tuve continuidad y ahí mejoré mi rendimiento", remarcó.

Crespo dejó en claro que si no pensaba que podía recuperar su nivel "me hubiera retirado y no perdía mas el tiempo con el fútbol", señaló.

"Hice un esfuerzo grande por seguir, por mantenerme vigente y por sentirme feliz dentro de un campo de juego", sentenció.

Crespo, además, habló del partido de esta noche ante Colombia, de la sensación de sentirse cerca de un Mundial y del trabajo que hizo el equipo en la altura La Paz al ganarle a Bolivia por 2-1.

"El partido con Colombia va a ser muy difícil como todos los de eliminatorias. Pero estamos tranquilos porque la tabla lo permite. Además, tuvimos la suerte de trabajar más de lo esperado y por eso estamos muy bien", explicó.

"Uno trata de no pensar en el Mundial, aunque es difícil. Es más, todavía no estamos clasificados, pero sí tenemos una ventaja considerable. Igual en un año pueden pasar muchas cosas", advirtió.

"A mí en seis meses me cambió la vida por cuestiones personales y futbolísticas. La pasé muy mal por las lesiones. No saber si vas terminar una práctica o un partido es horrible. Estar en uno y perderte tres, no poder pegarle a la pelota por si te vas a lastimar, es muy feo", amplió.

Sobre el triunfo después de 32 años en La Paz, Crespo elogió el trabajo de sus compañeros por ganar "un partido histórico".

"Ganaron un partido bárbaro que nos dejó en las puertas de un nuevo Mundial. Me siento muy orgulloso", señaló.

Crespo reiteró que siempre "tengo el deseo de jugar un gran partido en el seleccionado. Y está todo dado para que las cosas salgan bien. Todo depende de nosotros", explicó.

"Hoy estoy muy feliz, porque llegué al nivel que deseaba. Hay que ver si se hace fuerte el pedido de Chelsea o si Milan quiere retenerme. Mi intención era volver a jugar en primer nivel y lo logré", repitió.

Por último dejó una frase que pinta su presente. "Está muy difícil volver a River. De chico uno decía mirá que buen equipo, se parece a Milan. Hoy estoy ahí y no me quiero ir", sentenció. (Télam)
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