Ofensiva de mercantiles por una nueva moratoria

Kirchner recibirá a la conducción de Came, que reclama beneficios impositivos para las pymes

El presidente Néstor Kirchner recibirá hoy a la conducción de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), que en los últimos días lanzó un duro ataque a la política oficial empleada para el cobro de deudas impositivas y previsional a las pymes. Los mercantiles reclaman la instauración de una nueva moratoria impositiva a nivel nacional.

De acuerdo con lo informado por la entidad empresaria, el encuentro tendrá lugar a las 10 en Casa de Gobierno y se descuenta que entre los temas a analizar se destacará un pedido de reforma al Régimen de Asistencia Financiera Ampliada (Rafa), ofrecido por la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) para la puesta al día en materia impositiva y previsional.

En este sentido, el número dos de Came, Elías Soso, se reunió en los últimos días con legisladores santafesinos, con quienes analizó la posibilidad de incluir, vía Congreso Nacional, algunas modificaciones al régimen de facilidades de pago.


Recaudación extra
Según el dirigente empresario, el fisco podría recaudar unos 400 millones anuales adicionales si se pusiera en práctica el Plan de Refinanciación de Deudas Fiscales Pymes que diseñó la entidad mercantil, que apunta a que las obligaciones impagas se cumplan en base al crecimiento de cada una de las compañías del sector y que ya cuenta con un amplio respaldo de legisladores nacionales.

Soso señaló que el stock de deuda que hoy tienen las pymes alcanza los cinco mil millones de pesos.

El directivo calificó al Rafa como "un salvavidas de plomo" para las pymes. "Es ante todo sumamente caro, no tiene condonación de ningún tipo de interés -ni compensatorios ni punitorios-, no elimina las multas ni demás sanciones".

En ese sentido, ejemplificó que "una pyme que debía entre diciembre de 2001 y abril de 2002 contribuciones patronales por 35 mil pesos, a través del Rafa tendría que abonar 79 mil pesos, pagaderos en sesenta cuotas de 1.500 pesos".

"El efecto nocivo generalizado se notaría en noventa días, ya que una pyme podría afrontar el pago de la primera y segunda cuotas, pero ya con la tercera se vería en graves problemas, que dispararían una nueva serie de embargos y remates", agregó.

Soso explicó que hay una enorme cantidad de pequeños comercios que están teniendo un ingreso de caja promedio mensual de entre 10 mil y 20 mil pesos, con lo cual "este plan es imposible de pagar, y esto va más allá de la voluntad".

El dirigente dijo que "las pymes le pedimos a la Afip lo que Argentina le pide al mundo: pagar con crecimiento. No defendemos los evasores. Sólo queremos pagar de acuerdo a nuestras posibilidades".

Soso se reuné hoy con el presidente.