No cesa la polémica por la detención de Patti

La detención de Luis Patti —quien ayer cumplió su tercer día preso en una cárcel de Marcos Paz— sigue envuelta en la polémica, ya que mientras el abogado de la familia de una de las víctimas aseguró que hay pruebas “contundentes” en su contra, sus partidarios insisten con que se trata de una “persecución política”.

   El ex subcomisario fue detenido el jueves bajo los cargos de secuestro y torturas a Diego Muñiz Barretto, Juan José Fernández, Carlos Daniel Souto, Guillermo D’Amico, Luis D’Amico, Osvaldo Tomás Arriosti y Gastón Roberto José Gonçalves, todos militantes del peronismo de los años 70.

   Pablo Llonto, abogado de la familia del ex diputado peronista Muñiz Barretto, aseguró que “hay pruebas contundentes y tremendas” contra Patti.

   La defensa, en cambio, se apresta a presentar la semana próxima un escrito para pedir la libertad del imputado con el argumento de que se trata de un diputado electo (con inmunidad, aunque el Congreso no le tomó juramento en 2005 cuando pretendía asumir.

   “Hay contundentes pruebas de la participación de Patti en este caso y en los otros seis; hay pruebas tremendas en su contra”, afirmó Llonto.

   Por su parte, la diputada bonaerense Nélida Mansur, del Paufe, el partido de Patti, aseguró que Muñiz Barretto “no es un desaparecido, sino que es una persona que murió en un accidente automovilístico”, en insistió en que la detención del ex policía “forma parte de una persecución política”, que atribuyó al oficialismo.

   Llonto argumentó que el nombre de Patti “aparece porque cuando Muñiz Barretto está secuestrado en una comisaría de Escobar, donde estuvo unas horas, alcanza a sacar un papelito en el que le dice a su hermana: «Jovita, movete rápido, me detuvo un oficial Luis A. Patti, avisale a Joe»”. El abogado precisó que ese Joe “es José Alfredo Martínez de Hoz”, quien para entonces, 1977, era el ministro de Economía de la dictadura y conocido de la familia Muñiz Barretto, que era de clase alta.

   “Que sepamos, Martínez de Hoz no hizo nada”, aclaró el letrado. Luego explicó que ese papel permite que se hagan las denuncias ante la Nunciatura Apostólica, “donde queda registrado el nombre de Patti”.

   Muñiz Barretto fue secuestrado el 6 de febrero de 1977, con su secretario, Juan José Fernández, en Escobar.

   Llonto contó: “Aparece Patti y los secuestra”, a partir de lo cual ambos inician un calvario: “Los llevan a Campo de Mayo, donde son torturados y se ordena su eliminación. Los adormecen, los ponen en el auto de Muñiz Barretto y lo tiran a un río en Entre Ríos. El auto se hunde pero Fernández se salva”, resumió el abogado.