Líbano, sin presidente por el boicot de Hezbolá

Zeina Karam / AP

Beirut. — Líbano despertó ayer como una república sin presidente, sumido en las crecientes preocupaciones sobre el vacío de poder que ha agravado la crisis política de un año.

   La capital permanecía en calma y los negocios abrieron de manera normal en la mañana, tras una jornada agitada en la que el presidente prosirio Emile Lahoud dejó el cargo sin que se nombrara un sucesor, tras anunciar que cedía los poderes de seguridad al ejército. Cientos de soldados con tanques se vieron en las afueras del Parlamento de Beirut y en las principales calles de la capital. El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, se manifestó “extremadamente preocupado” por la situación en Líbano y llamó a todas las fuerzas políticas a mantener la calma.

   El último anuncio de Lahoud, acerca de que el país se encontraba en un “estado de emergencia”, fue rechazado por el gabinete prooccidental del primer ministro Fuad Saniora.

   Muchos libaneses temen que la situación desencadene en hechos de violencia entre los simpatizantes del gobierno de Saniora y la oposición prosiria, encabezada por la milicia shííta de Hezbolá. “El período de Lahoud termina en una república sin presidente”, señaló el diario An-Nahar. Otro rotativo, Al-Balad, publicó un marco sin foto en su primera plana, para simbolizar el vacío de poder.



Sin quórum.  La salida de Lahoud, aliado firme del régimen sirio durante sus nueve años de gestión, era una meta del gobierno instaurado por la mayoría parlamentaria antisiria, que ha tratado de llevar a la Presidencia a uno de sus miembros. Pero Hezbolá y otros grupos opositores han impedido que los legisladores elijan nuevo presidente dejando al Parlamento sistemáticamente sin quórum.

   La disputa ha llevado al Líbano hacia un territorio riesgoso y desconocido. Ambas partes se han enfrascado en una guerra de recriminaciones, acusándose de violar la Constitución, y no parece cerca un acuerdo sobre un candidato que asuma como jefe de Estado.

El presidente prosirio Emile Lahoud saluda al dejar el cargo.