Vuelven a casa los turistas que iban en el crucero hundido

Un avión chileno inició su traslado desde dos bases antárticas a Punta Arenas

Los náufragos rescatados de un crucero que se hundió en las heladas aguas antárticas iniciaron ayer el regreso a sus hogares, un día después de que la nave chocara con un témpano y se hundiese. Por la tarde arribó a Punta Arenas el primer contingente trasladado en avión desde la base Frei, en al península antártica.

   Los 154 pasajeros y tripulantes de la nave Explorer escaparon sanos y salvos tras ser evacuados del barco, que colapsó cerca de la isla Rey Jorge (King George), en la península Antártica.

   “Estoy muy aliviada y feliz de que todos salimos de la nave. Si no, habría sido un gran desastre”, dijo Eli Charne, de 38 años de edad, y quien vive en California, Estados Unidos. “Es realmente bueno estar ahora en el camino de regreso a casa”, agregó en Punta Arenas. Todavía llevaba puesto el chaleco salvavidas del crucero.

   Los náufragos fueron transportados anteayer a la base chilena Presidente Eduardo Frei y en la tarde de ayer, luego que se calmaran fuertes vientos y mejorara la visibilidad en el área. Comenzaron a ser trasladados en grupos en un avión Hércules C130 de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) a la ciudad de Punta Arenas, en el sur de Chile.

   Los pasajeros, entre los que se incluyen estadounidenses, británicos, canadienses, australianos, holandeses, argentinos y de otras nacionalidades, recibieron alimento, abrigo y atención médica en las bases de Chile y de Uruguay en la península Antártica.

   “Pensamos que el barco se hundía. Estábamos en el nivel más bajo del crucero, así que salimos del cuarto y presionamos el botón de emergencia cuando comenzó a entrar el agua”, dijo Charne.

   Los pasajeros viajaban en el crucero propiedad de la empresa canadiense de viajes G.A.P. Adventures, que realiza recorridos de dos semanas alrededor de la Antártida a un precio cercano a los 8.000 dólares la cabina.

   Más pequeña que otros barcos que realizan cruceros, la nave contaba con la tecnología para aproximarse a la Antártida.

   La isla Rey Jorge está situada unos 1.127 kilómetros al sur del Cabo de Hornos, la punta más austral del continente americano, y es la mayor de las islas denominadas Shetland del Sur.   El Ms Explorer, crucero operado en Canadá y construido en 1969 como el primero de una clase de barcos para turistas capaces de recorrer todo tipo de mares, vio cortada su carrera el cuando chocó con hielo, hizo agua y se hundió luego de 15 horas. Sus 154 pasajeros y tripulantes pasaron varias horas en botes salvavidas antes de que un crucero noruego los rescatara.



Tuvieron suerte. “Fueron afortunados porque otros barcos justamente estaban en la zona y pudieron acudir en auxilio. El mar estaba en calma y no había tormenta, lo que es poco frecuente en la Antártida”, comentó el teniente coronel Waldemar Fontes, jefe de la pequeña base uruguaya donde se refugiaron varios de los sobrevivientes.

   El capitán Arnvid Hansen, cuyo barco Nordnorge rescató a los náufragos, dijo que la llamada de auxilio del Explorer llegó varias horas antes del amanecer y que él navegó a todo vapor durante cuatro horas y media, en un intento para llegar antes de que el clima empeorara, para poder efectuar el rescate.

   El hundimiento del Explorer provocó una mancha concentrada de gasoil de casi 2 kilómetros de largo por 2,5 de ancho. Funcionarios argentinos están evaluando el impacto ambiental del siniestro. (Reuters y AP)

Los turistas llegan al aeropuerto de la ciudad de Punta Arenas.