Inédito festival de kiteboarding

Competidores y público le dieron un marco colorido al tercer festival de este deporte acuático

Con un buen marco de público y de competidores se desarrolló ayer la primera jornada del Tercer Kiteboarding Rosario Festival , en el banquito de arena ubicado frente al parque Urquiza. Se trata de un deporte acuático que combina aspectos de otras disciplinas, como el surf, el wakeboard, el windsurf y el parapente. Tal vez este último permite identificarlo. Ya son pocos, en la ribera local, los que permanecen ajenos a los cometas que, desplegados al aire y empujados por el viento, deslizan sobre el agua las tablas de los atletas.

   El extremo norte del banquito San Andrés (sector de islas a la altura de Pellegrini) se vio colmado de fans de la incipiente disciplina desde las dos de la tarde. Decenas de kits clavados en la arena esperaron los favores de un viento que no ayudó demasiado —debe soplar con intensidad— a que los navegantes pudieran desplegar sus maniobras.

   El encuentro es organizado por la agrupación rosarina Amigos del Kiteboarding, conjuntamente con el Club Náutico Rosario que aportó infraestructura esencial, como las boyas para demarcar las canchas de competición. .

   “Los participantes asisten, preparan su equipo y, cuando el viento lo permite, comienza la competición. Pero ayer, justamente por eso, no pudieron concretarse las pruebas propiamente dichas. “Igualmente, la idea de festival dio pie para realizar otras actividades paralelas, como prácticas en tierra y aprender más en un marco distendido”, explicó Gabriel De Rosa, uno de los organizadores, que igualmente calificó al encuentro de “exitoso” en virtud de la buena convocatoria.

   Es que la brisa sopló levemente y nunca se transformó en viento necesario para desarrollar las pruebas. En rigor, fueron unos pocos los cometas que planearon.

   De todos modos el festival dio para más. Al compás del reggae que sonaba desde el bar, los aspirantes se interiorizaron de los aspectos del deporte y hasta tomaron clases en un trípode acondicionado en tierra, mientras realizaban consultas a los más experimentados, como Hugo Caló, juez y director deportivo de la competición, que tuvo tres categorías: aspirantes, intermedia y pro.



Maniobras y saltos. El festival de kiteboarding tendrá su segunda y última jornada el próximo fin de semana, donde se espera que el viento permita al jurado calificar las distintas disciplinas y categorías. Están previstas modalidades como “freestyle” (estilo libre), por el cual se ponderan saltos y maniobras, “larga distancia” (tipo carrera), y la denominada “best trick” (mejor maniobra).