El ex presidente de Brasil dijo que Lula continuó con sus políticas

Fernando Henrique Cardoso: "Brasil seguirá apostando al Mercosur"

Durante su paso por Buenos Aires, defendió al candidato socialdemócrata Alckmin

Jorgelina Hiba

Fernando Henrique Cardoso no ahorra palabras a la hora de hablar de Brasil. Verborrágico hasta la ironía, el presidente que durante ocho años (1994-2002) estuvo al frente del más poderoso país sudamericano pasó por Buenos Aires esta semana y, en un encuentro con los corresponsales extranjeros, no se cansó de remarcar que Lula le copió el modelo económico y social pero fracasó en lo político. "Lula hace lo mismo que hicimos nosotros en el gobierno, pero dice lo contrario, por eso hace las cosas sin convicción", disparó en un castellano veloz mechado de palabras en portugués.

A pocos días de la segunda vuelta electoral en la que los brasileños tendrán que optar si el Partido de los Trabajadores extiende por otros cuatro años su mandato o en cambio vuelve la socialdemocracia, Cardoso lanzó un mensaje a los presidentes de la región al pedir "dejar de lado" los preconceptos sobre Gerardo Alckmin, el candidato del PSDB, a quien desde Buenos Aires, Caracas y La Paz ven con indisimulada cara de preocupación.

"En las relaciones internacionales lo que cuentan son los intereses y no las simpatías personales, de otra manera, las construcciones supranacionales como el Mercosur no pueden avanzar", dijo con contundencia quien fuera hace 40 años atrás uno de los autores de la teoría de la dependencia, el gran aporte latinoamericano a la sociología mundial. Ya sobre el final de la charla en el Hotel Alvear y después de vaticinar que las encuestas que hoy dan ganador al PT "pueden cambiar", le pidió grandeza a Lula para no convertirse en un político del montón. "El es un verdadero símbolo, tiene una historia que respetar, pero en su afán de ganar las elecciones se está convirtiendo en uno más, y eso es grave para mi país", dijo.


Tiempo de balance
En plena campaña hacia el ballotage del próximo domingo, el ex presidente brasileño centró buena parte de su encuentro con la prensa en trazar un paralelo entre la política económica y social que aplicó su gobierno entre 1994 y 2002 y lo que hizo Lula durante los últimos cuatro años.

"Yo diría que el balance de la gestión de Lula es positivo, pero hay que ver cómo se llegó a esto, ya que hablamos de un reordenamiento de los números que empezó en los 90, cuando logramos estabilidad en la moneda, ordenamos el aparato público, y nos focalizamos en políticas sociales gracias a políticas universales en áreas como salud y educación. Yo creo que el PT siguió las líneas económicas de mi gobierno, donde se privilegiaron el superávit primario y el tipo de cambio. Eso se mantuvo, y por eso puedo decir que hubo más continuidades que ruptura. Yo digo medio en broma medio en serio que nos peleamos por seguir el mismo camino, y que si eso es así deberíamos aprender de los chilenos para poder armar una Concertación en Brasil", opinó Cardoso.

Además, rescató los antecedentes socialdemócratas del programa Bolsa Familia, un subsidio que se entrega a las madres para garantizar que sus hijos vayan a la escuela y sean vacunados que se convirtió en el emblema de la política social de Lula. "Todo empezó en municipalidades gobernadas por el PSDB, lo que hizo Lula fue juntar varios de esos planes y los amplió, aumentando el monto del subsidio y la cantidad de gente atendida", explicó.

A la hora de la crítica explícita, para el reconocido sociólogo la gestión petista falló sobre todo en su manera de hacer política. "Hay ahora demasiada confusión entre lo público y lo privado. Y la utilización de métodos no ortodoxos para financiar al oficialismo, con denuncias graves por hechos de corrupción hechas por el mismo Fiscal General, son una evidencia de esto", opinó, para agregar que existe en Brasil "una casta burocrática partidista" que se convirtió "en una semilla de nomenclatura".

Ya en el plano del análisis internacional, Fernando Henrique Cardoso habló sobre el futuro del Mercosur y la relación de su país con los vecinos más polémicos, como Bolivia y Venezuela. "A largo plazo, el Mercosur puede ser como la Unión Europea", dijo con una cuota de esperanza, para recordar que hace 50 años "nadie imaginaba que Europa iba a ser lo que es hoy".


Mercosur garantizado
También insistió sobre el hecho de que, gane quien gane las elecciones del domingo que viene, la continuidad del bloque regional está más que garantizada, ya que no hay grandes diferencias entre los dos partidos. "Con Lula o con Alckmin será lo mismo. Siempre habrá roces lógicos dentro del bloque, pero la consolidación ya está dada, y eso no cambiará", aseguró.

"Sólo hace falta sacarse los prejuicios de encima. Si hay preconceptos sobre Alckmin, van a desaparecer rápidamente", afirmó.

Consultado sobre la reciente incorporación de Venezuela como socio pleno al bloque regional, el ex presidente aseguró que "se cumplió un viejo anhelo" anterior a la llegada de Hugo Chávez a la presidencia de ese país. En ese punto de la charla, Cardoso sacó a relucir su mejor retórica al afirmar que a la gestión de Chávez "la juzgará la historia", ya que "sólo desde esa perspectiva podrá evaluarse si supo aprovechar o no la oportunidad única de reformar estructuralmente Venezuela que le da la renta petrolera".

Aún así, se mostró contrario a lo que considera "injerencias" del gobierno de Caracas en otros países de la región, como por ejemplo en Bolivia, donde consideró que el venezolano influyó sobre la decisión de Evo Morales de nacionalizar los hidrocarburos, una decisión que Cardoso definió como una "expropiación".

"Entiendo lo de Morales, porque es presidente de un país pobrísimo y tenía que tomar medidas duras si su intención era cambiar algo. Pero creo que equivocó el camino, ya que ahora tiene que sentarse a negociar con los mismos a los que trató con dureza hace pocos meses atrás", dijo refiriéndose sobre todo a Petrobras, la empresa pública brasileña de petróleo que es a su vez uno de los principales inversores externos en Bolivia.

En este punto hizo un alegato a favor del realismo político, algo que en su opinión escasea por estas tierras. "Se habla de construir un gran gasoducto desde Venezuela hasta Argentina. Eso es tener mucha imaginación pero poca practicidad, pero bueno, las ideas también mueven a la gente".

El ex presidente brasileño Fernando Henrique Cardoso ofreció una rueda de prensa de la que participó La Capital. Criticó a Chávez y Evo.