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 sábado, 21 de octubre de 2006  
Una obra emblemática

La Iglesia Cristo Obrero y Nuestra Señora de Lourdes, en Atlántida, fue construida entre 1958 y 1960, sólo algunos años más tarde a la ejecución de Ron Champ (Le Corbusier). La iglesia de Atlántida es una de las obras más paradigmáticas de Dieste.

Integramente de ladrillo armado, brota del suelo con una planta rectangular que, a medida que crece en altura, va dejando la forma recta para transformarse en una sucesión de curvas y contracurvas que no sólo van enfatizándose a medida que se alejan del suelo, sino que su eje deja de coincidir con el de la planta inicial para irse abriendo. De tal manera, sus cortes transversales describen a lo largo de la planta una sucesión de paralelogramos con la base menor en el suelo y la mayor a la altura de la cornisa.

Pero no le bastó con semejante diseño estructural; la cubierta se resuelve mediante una sucesión de bóvedas de doble curvatura que se intercalan entre cóncavas y convexas. Es la ondulación la que le da tanto a los muros como a la cubierta la capacidad de resistencia.Dieste procuraba lograr la resistencia por medio de la forma y no con acumulación de material.

Juegos en los muros que hacen de tapa, articula el ladrillo cambiando la posición o la traba del mismo, generando intersticios en los cuales coloca láminas de ónix que tamizan la luz al ingresar a la iglesia.

Dieste mezcla el cálculo perfecto con detalles que se parecen más al de un artesano que en su telar modifica el punto, lo tensa o afloja para permitir el ingreso de la luz. Cualquier tipo de descripción técnica es estéril al intentar describir la majestuosidad de esta obra de opulencia estructural y materialización franciscana.

El espacio interior único, sin divisiones y prácticamente sin desniveles, elimina cualquier tipo de distancias o diferenciación entre el orador y los feligreses. Mediante la resolución arquitectónica, la capilla expresa cuestiones tanto éticas como morales que fueron ideas guías en la vida del ingeniero.
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Interior de la iglesia Cristo Obrero y Nuestra Señora de Lourdes, en Atlántida.

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