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sábado,
21 de
octubre de
2006 |
Por primera vez cuestionan las normativas de la provincia y del municipio al considerarlas inconstitucionales
El Cairo fue a la Justicia contra la
ley antitabaco y se esperan más casos
Se argumenta discriminación contra los fumadores y perjuicio económico para
los propietarios del bar
Los dueños del emblemático bar El Cairo interpusieron en la Justicia una presentación declaratoria de inconstitucionalidad de la ley antitabaco santafesina y también contra la ordenanza municipal que se ajustó a esa norma. El constitucionalista Iván Cullen fue el encargado de presentar el primer recurso en Rosario y lo hizo en el juzgado Civil y Comercial Nº9, a cargo de Marcelo Costa. "Hemos hecho una larga y cuidadosa presentación y queremos que el juez se tome todo su tiempo para resolver", aseveró Cullen, quien por ahora sólo representa a los empresarios del bar de Sarmiento y Santa Fe. Sin embargo, hay otros bares y restaurantes que están debatiendo con diversos abogados la posibilidad de presentar otros recursos en el Poder Judicial. La lista es larga y abarca tanto a bares grandes como pequeños del micro y el macrocentro. "Sí, somos varios los estamos pensando en esa posibilidad", confió el titular de un negocio de la zona de Entre Ríos y Virasoro, que prefirió no ser identificado hasta tanto resuelva con sus abogados el contenido y la modalidad de la presentación.
Cullen pormenorizó los considerandos de la presentación en contra de la ley santafesina a la catalogó como la "más restrictiva" implementada en el país. "No vamos a discutir si el tabaco hace mal o no, pero sí nos basamos en lo que dice la Organización Mundial de la Salud (OMS), que considera a un fumador como un adicto; es decir, un enfermo, y en ese marco nosotros como Estado, con esta ley, lo culpabilizamos y lo tratamos como un paria en vez de contenerlo y persuadirlo como aconsejan los especialistas", reflexionó el abogado.
En ese marco, también hizo hincapié en la necesidad de distinguir entre los sitios públicos de asistencia obligatoria (oficinas públicas, hospitales o sanatorios, transporte, etcétera), y aquellos a los que se asiste voluntariamente, como bares, restaurantes y boliches, entre otros.
"El Cairo tiene en concreto un perjuicio económico con esta ley, su actividad se ve afectada. Ese es un sitio emblemático de la ciudad y un lugar que históricamente cobijó a la bohemia. El fumar y tomar café es parte de la cultura de nuestra sociedad, en especial en ese sitio", afirmó el profesional, que aclaró que es un no fumador empedernido.
Es así como en la presentación judicial Cullen intenta demostrar las pérdidas económicas de los propietarios del restaurado bar. "Esa esquina estuvo cerca de la piqueta, allí se hizo una gran inversión que revalorizó toda la zona. Eso fue mucho antes de que se hiciera la ley antitabaco, que ahora, con la disminución de clientes, puede provocar en el peor de los casos hasta el cierre del local, o tal vez la reducción del personal", señaló.
Los dueños de El Cairo, Mario D'Agostino y Eduardo Rubin, advirtieron que la recaudación del emprendimiento cayó desde que se prohibió fumar entre un 20 y un 25 por ciento. "Cuando rehicimos este sitio, que tiene 500 metros cuadrados de superficie, un techo de siete metros de altura, extractores de aire en cada ventana, nunca pensamos que no podríamos dejar fumar a los clientes, muchos de ellos históricos. Hay momentos en que el lugar está vacío, porque era típica la reunión de amigos con un cigarrillo o el cliente del café y el pucho", aseguraron los propietarios. A renglón seguido detallaron que tienen 50 empleados y costos fijos "altísimos".
Tanto Rubin como D'Agostino (uno no fumador y el otro sí), hicieron hincapié en que admiten que el tabaco es perjudicial para la salud pero rechazan los alcances de la ley. "Se trata a los fumadores como se trataba antiguamente a los leprosos, y es más, nos ponen en el papel de policía con nuestros propios clientes", se quejaron.
Al mismo tiempo, aclararon que recurrieron a la Justicia para que se pueda dilucidar si efectivamente la ley santafesina y la ordenanza municipal violan la Constitución Nacional. "Somos muy respetuosos de la ley, y por supuesto que acataremos lo que se determine, estamos esperando el fallo para ver cómo continuamos", aseguraron.
Reacción rápida
La reglamentación de la ley antitabaco se votó en Santa Fe el 29 de agosto pasado, cuando se estipularon las multas. A partir de esa fecha y a pesar de que la ley había sido sancionada unos meses antes, se dejó de fumar en los bares y era posible ver a los fumadores en las veredas o puertas de los locales prendiendo un pucho.
No fue así en Buenos Aires, donde la ley se implementó a principios de mes y en menos de una semana fueron decenas las presentaciones judiciales que se hicieron en su contra, tanto de comercios gastronómicos como salas de juego y, también, vecinos particulares. En muchos de los casos se argumentó la inconstitucionalidad de la normativa a la que consideraron violatoria de los derechos de propiedad y de la intimidad de las personas, además de los derechos individuales.
Las idas a la Justicia en contra de la ley antitabaco -que aún no se expidió en la ciudad de Buenos Aires- se realizaron a pesar de que la normativa es más flexible que la santafesina. Por ejemplo, los locales de más cien metros cuadrados pueden tener un sitio para fumadores. Así las cosas, habrá que esperar qué decide la Justicia santafesina que dejará sentado un antecedente tanto para avalar o no a las leyes vigentes.
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El tradicional reducto de Santa Fe y Sarmiento es la punta de lanza de una campaña que abarca a más confiterías y abogados.
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