Año CXXXVII Nº 49263
La Ciudad
Política
Información Gral
El Mundo
Opinión
La Región
Policiales



suplementos
Ovación
Turismo
Mujer
Economía
Escenario
Señales


suplementos
ediciones anteriores
Salud 11/10
Página Solidaria 11/10
Turismo 08/10
Mujer 08/10
Economía 08/10
Señales 08/10
Educación 07/10

contacto
servicios
Institucional



 domingo, 15 de octubre de 2006  
Descubren un antiguo cementerio de disidentes

Un grupo de obreros que realizaba tareas de remodelación en la plaza Primero de Mayo, en el barrio porteño de Balvanera, encontró restos de lo que fue en 1830 el cementerio de los disidentes, un lugar donde se enterraba a las personas que no profesaban la religión católica.

El lugar en cuestión está situado dentro de la plaza ubicada entre las calles las calles Alsina, Pasco, Hipólito Yrigoyen y Pichincha y, antes del hallazgo arqueológico, era el sector donde estaban las juegos para los niños.

En abril del año pasado, el paseo fue cerrado para realizar una serie de refacciones y para febrero de este año, luego de una serie de factores que retrasaron las remodelaciones, los obreros comenzaron a trabajar en el área de juegos.

Pero, al iniciar las excavaciones en el arenero para hacer el drenaje de la plaza, los trabajadores se encontraron con restos óseos, una lápida intacta de mármol y distintos objetos que daban cuenta de la existencia del cementerio que en el año 1830 albergó a los muertos "disidentes".

En el denominado "cementerio de los disidentes" se enterraba a las personas que no profesaban la religión católica apostólica romana y que su mayoría eran protestantes de origen británico, norteamericano o alemán.

Es que por aquellos días estaba prohibido que estas personas de distintas colectividades fueran inhumadas en los lugares denominados "consagrados", como templos católicos y campos santos.

Ante ello, en 1833 se emplazó en lo que hoy es Balvanera el segundo cementerio para albergar a "los disidentes", que fue rápidamente colmado ante la seguidilla de epidemias que afectaban por esa época a los porteños.

Para inicios del 1900, el cementerio fue cerrado definitivamente y se decidió el traslado de los restos óseos, sin embargo, este hallazgo determinó que aún permanecen en el lugar algunos restos. (Télam)
enviar nota por e-mail
contacto
Búsqueda avanzada Archivo




  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados