El interés por un clásico

El director contó el proceso que llevó a recrear el personaje

Juan Pablo Buscarini confesó que se entusiasmó con la idea de dirigir "El ratón Pérez" desde el principio: "Me pareció no sólo una buena idea, sino hasta sospechoso o más bien injusto que nunca nadie le hubiera dedicado nada desde lo audiovisual a un personaje tan entrañable y tan metido en la cultura popular y familiar". Así surgió este filme que cuenta con las actuaciones protagónicas de Ana María Orozco (ex "Betty, la fea") y Fabián Mazzei ("Amor pirata"). La novedad, según contó Buscarini, es el giro que le da a la historia: "Lo que la hace una película contemporánea, es algo que nunca nadie explicó y es cómo hace el Ratón para conseguir todo ese dinero para los regalos y qué hace con los dientes. Es una idea apócrifa, pero hace a la magia de la película, que después suma una conspiración contra Pérez lo que le da un clima de aventura".

Antes de llegar a dirigir un filme que se exhibirá aun en países donde el ratón Pérez no forma parte de la mitología infantil sino que se valorará por su carácter de comedia familiar, Buscarini capitalizó una extensa experiencia. El director, un ex alumno del colegio Sagrado Corazón que vivió toda su vida en la zona del centro, después de realizar estudios de ingeniería y de un tiempo en la Escuela de Cine de Rosario y en la escuela de Luis Bras, partió a Londres. Allí estudió en la universidad de Middlesex, donde cursó un máster en arte y en el uso de nuevas tecnologías: "Me admitieron y fue una cosa bastante selecta -reconoció- con sólo seis alumnos. Después me quedé trabajando en Francia y en España, y volví en el 94 para trabajar con Carlos Sorin, que me ofreció asociarme para hacer cine publicitario. Después surgió el trabajo en Patagonik, para encargarme de lo que tenía que ver con animación y efectos", contó el director.

Juan Pablo Buscarini.