Piensa en Italia

Cuando Italia derrotó a Alemania 4-1 en un partido amistoso, el entrenador Juergen Klinsmann casi tuvo que irse del país. Ahora es virtualmente un héroe nacional.

"Querían echarlo, pero nosotros nunca dudamos, sabíamos que la derrota con Italia en marzo no era la verdadera cara del equipo", dijo el coordinador de la selección, Oliver Bierhoff.

Hasta los más duros críticos se arrepintieron. Alemania lleva nueve partidos sin perder bajo la dirección de Klinsmann, incluyendo cuatro en el Mundial. El siguiente escollo en la búsqueda del título es Italia, con la que definirán una plaza en semifinales el martes en Dortmund, donde Alemania nunca perdió un partido. Pero al mismo tiempo Alemania nunca derrotó a Italia en cuatro partidos mundialistas.

Bierhoff dice que los tiempos cambiaron. "Lo que logró este equipo es único. El mundo nuevamente le teme al equipo alemán. Tenemos determinación y confianza", señaló.

El mediocampista Torsten Frings aseguró que "ahora estamos fuertes mentalmente y en buena forma, de manera que aquello no volverá a ocurrir", agregó.

No hubo demasiadas celebraciones después de la victoria. "No podemos relajarnos ahora, aún tenemos dos grandes rivales que vencer", dijo Bierhoff.

Los jugadores pasaron la mañana de ayer en la sala de acondicionamiento físico, incluso el capitán Michael Ballack y el goleador Miroslav Klose, que sufrieron fuertes calambres en el partido con los de Pekerman. Por la tarde, recibieron a familiares.