[perspectivas]

Gabriel Jiménez Emán: "La poesía es una respuesta al asombro de existir"

El escritor venezolano estuvo en el Teatro El Círculo. Leyó textos y dejó ideas para reflexionar

Osvaldo Aguirre / La Capital

Gabriel Jiménez Emán nació en Caracas en 1950. Es autor de una obra múltiple y compleja, que reúne poesía, narrativa y ensayo y que lo ha consagrado como uno de los autores más importantes de la literatura venezolana contemporánea. Además trabaja como traductor, editor y profesor, siendo actualmente titular de la Cátedra Nacional de Literatura y Humanismo. El pasado viernes 9 estuvo en Rosario, como invitado en el ciclo Poesía en el Círculo, que se realiza en el Teatro El Círculo, donde leyó poemas y dialogó con el público.

Jiménez Emán vino acompañado por Esteban Moore y Rodolfo Privitera, dos poetas y editores que compartieron el estrado en El Círculo. Y antes de su lectura accedió a este diálogo.

-¿Cuál es el punto de contacto entre su poesía y su narrativa?

-No hay especialismos en literatura. Una persona que se interese por el hecho artístico de la palabra no puede reducir su investigación a una sola cosa. El trabajo estético de la poesía es lo más importante para un escritor que se precie de tal. El novelista trabaja con palabras pero también trabaja con música, con imágenes visuales, con productos culturales, diversas imágenes que nos proveen la cultura y el paisaje. La literatura es un gran tejido de cosas que requieren unas reflexión por las ideas, con la filosofía, otras requieren una reflexión pura de la poesía y otras de de la reflexión narrativa, que es la de la novela o el cuento. Pero creo que estas cosas se interconectan, no se puede pensar en un narrador puro o en un poeta puro.

-¿Qué entiende por el trabajo estético de la poesía?

-La poesía es una gran respuesta al asombro de existir. Una respuesta infinita, que no termina nunca. Llevar a cabo esa respuesta, que en realidad es una pregunta, requiere de mucho estudio y de mucha reflexión sobre el lenguaje.

-¿Qué cosas, como dice, se tejen en la literatura?

-Las voces del mundo. La literatura está llena de voces. Y un poeta es aquel que escribe su voz interior. No puedes escribir nada si no descubres dentro de ti una voz interior. Se trata de oírte a ti mismo, oír a las voces del mundo y hacer un tejido con ellas, de cocinar las voces del pasado, que tenemos en el ADN, y las del presente. las voces esenciales de la literatura.

-¿Por ejemplo, cuáles?

-La imaginación y la sensibilidad. La memoria juega con la imaginación, la imaginación juega con la memoria y funda esta cosa que llamamos presente, que está huyendo de nosotros permanentemente y que no se sabe dónde va. Pero estamos instalados en él y por eso nos hacemos esta pregunta, porque no sabemos exactamente qué somos. La poesía es la forma mejor que ha inventado el hombre de revelarse cosas. La narrativa cuenta con una serie de artilugios que son la anécdota, la referencia práctica de la vida cotidiana, la descripción, los personajes, que forman parte más directa de lo que vivimos en la cotidianeidad. Quizá se deba a que acudimos más al hecho anecdótico que al hecho esencial, lo cual no quiere decir que eso carezca de profundidad. En todo caso uno está embarcado en este proceso infinito de la búsqueda por el lenguaje.

-¿Qué noticias tienen en Venezuela sobre la poesía argentina?

-Siempre ha existido un diálogo, un contacto entre los poetas argentinos y los poetas venezolanos por vía de la poesía tradicional, por ejemplo el "Martín Fierro", que se ha leído en Venezuela con mucho gusto, con mucho interés. Pero también a través del modernismo: Lugones fue muy importante para Venezuela. Por supuesto Borges, por supuesto Cortázar, ambos poetas que escribieron prosa. Después de esa generación está Olga Orozco, Alejandra Pizarnik, Juan Gelman, Alberto Girri, Rodolfo Alonso, el grupo de Poesía Buenos Aires. En fin, siempre hubo una fluidez de la literatura argentina. En la actualidad es más difícil orientarse porque hay más referencias, hay más libros. Sin embargo hay cosas que se interrumpen por razones que yo desconozco, quizá por falta de revistas, algo de lo que siempre me he quejado. La misión que tenemos ahora es acercarnos, establecer puentes para conocernos mejor, y conocer lo que se hace en Uruguay, en Colombia, en Cuba, en Chile, en la República Dominicana. Me parece absurdo que yo aparezca por primera vez en Argentina a los 56 años. Fui hace poco a República Dominicana: ¿cómo es posible que nunca hubiera ido a un país, maravilloso por su gente, que está a dos horas de mi casa? Yo prefería París. ¡Qué tonto! ¿Cómo es esto que uno no va a los países que realmente tiene que ir? Ahorita me voy a Montevideo, con Esteban Moore. ¿Cómo es que uno se desconoce a sí mismo y prefiere conocer países que le venden por tevé?

-¿Qué descubre con este viaje?

-Descubro que somos lo mismo, que luchamos por las mismas cosas, que tenemos cosas que nos distinguen, por supuesto, pero también muchas cosas en contacto.

De visita. Jiménez Emán participó en el ciclo "Poesía en El Círculo".