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 domingo, 25 de junio de 2006  
Cocina: sabores de vida

Quique Andreini / La Capital

Hoy, mi querida amiga, quiero compartir un relato que me conmovió por la simpleza y la sabiduría.

Cuentan que cierta mañana, Nasrudin envolvió un huevo en un pañuelo, se fue al centro de la plaza de su ciudad y llamó a los que pasaban por allí: "¡Hoy tendremos un importante concurso!, dijo. Quien descubra lo que está envuelto en este pañuelo recibirá de regalo el huevo que está dentro".

Las personas se miraron, intrigadas. Nasrudin insistió: "Lo que está en este pañuelo tiene un centro que es amarillo como una yema, rodeado de un líquido del color de la clara que a su vez está contenido dentro de una cáscara que se rompe fácilmente. Es un símbolo de fertilidad y nos recuerda a los pájaros que vuelan hacia sus nidos. Entonces, ¿quién puede decirme lo que está escondido?"

Todos los habitantes pensaban que Nasrudin tenía en sus manos un huevo, pero la respuesta era tan obvia que nadie quiso pasar vergüenza delante de los otros. ¿Y si no fuese un huevo, sino algo muy importante, producto de la fértil imaginación mística de los sufís? Un centro amarillo podía significar algo del sol, el líquido a su alrededor tal vez fuese algún preparado de alquimia. No, no, aquel loco estaba queriendo que alguien hiciera el ridículo.

Nasrudin preguntó dos veces más y nadie se arriesgó a decir algo que no fuera apropiado. Entonces, abrió el pañuelo y mostró a todos el huevo. "Todos vosotros sabíais la respuesta y nadie osó traducirla en palabras", afirmó.

Así es la vida de aquellos que no tienen el valor de arriesgarse, las soluciones nos son dadas generosamente, pero hay quienes siempre buscan explicaciones más complicadas, y terminan no haciendo nada. Sólo una cosa convierte en imposible un sueño: el miedo a fracasar. Y ahora vamos a cocinar.


Pollo con salsa de manzana y curry
Necesitará:

  • 1 pollo sin piel

  • clavo de olor

  • 1 pizca de pimienta negra

  • 1 cebolla

  • 1 manzana verde

  • 1 cucharadita de curry

  • 1 pote chico de crema de leche

  • 1 taza de caldo de ave

    Troce el pollo y dórelo rápidamente en aceite. Baje el fuego y agregue el caldo, la cebolla en rodajas, la manzana verde rallada o en trozos pequeños, el clavo de olor, la pimienta y la sal. Deje cocinar lentamente. Cuando esté casi cocido, incorpore la crema de leche y el curry. Es ideal acompañarlo con un simple arroz blanco.

    El curry es una mezcla de diversas especias muy utilizada en la India y en el resto de mundo. Se trata de un polvo de composición variable, pero también se lo suele encontrar en forma de pasta, no muy aconsejable ya que una vez usada comienza a secarse. Está formado principalmente por diferentes especias y hierbas secas: cilantro, canela, jengibre, pimienta de cayena, clavo, nuez moscada y cúrcuma (uno de los ingredientes más importantes y el que le da el color amarillo característico).

    En general hay tres tipos según su grado de "picor" (como decía el Gato Dumas), que en inglés se denominan: mild (suave), hot (picante) y very hot (muy picante).
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