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| jueves,
22 de
junio de
2006 |
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Charlas en el Café del Bajo
-"El problema de nuestros tiempos es que el futuro ya no es lo que era"
-¿Qué dice Inocencio?
-¿No es para reflexionarla esa frase del escritos francés Valéry?
-Supongo que sí, pero a qué viene.
-A que me pregunto a veces, especialmente cuando observo algunas actitudes sociales, qué clase de futuro nos aguarda. ¿Hizo, como yo, Candi, una reflexión sobre el acto del Día de la Bandera?
-Desde luego que sí.
-¿Y a qué conclusión llegó?
-Bueno, ¡Pobre Belgrano y pobre nosotros!
-Siga, siga.
-Hubo poca gente en el acto, pero se me ocurrió pensar, de pronto, que si hubiera estado el presidente, si hubiera estado el gobernador, seguramente el peronismo hubiera movilizado a su gente (como lo hizo el 25 de Mayo en la histórica plaza), no por Belgrano, ni por la bandera, desde luego, sino por puro fervor político. Pero al menos el acto hubiera tenido colorido, pero como no estuvieron ellos, que de Belgrano y la bandera se ocupen otros. Eso por un lado, por otro creo que no correspondía pasar el feriado al lunes y hacer el acto el martes decretando feriado para la administración pública. La mayoría de la ciudad trabajando, los turistas de regreso en sus hogares y un acto descolgado de la vida cotidiana. Esa es la impresión que tuve. ¡Eso sí...!
-¿Qué va a decir?
-Por la tarde vino León Gieco y colmó el Monumento. Ese es el fervor patriótico que en ocasiones tenemos. Aclaro que no generalizo.
-¿Usted me puede explicar qué significa esto de traer un 20 de Junio a un León Gieco para que cante en el Monumento?
-A mí no me parece mal que se traiga a un artista en cualquier momento del año. Ello forma parte de un programa cultural. Si bien es cierto que la cultura en este país tiene otras prioridades, no me parece incorrecto que se presente un artista contratado por el Estado. Lo que me desagrada sobremanera es que se aproveche la presencia de la multitud y del artista para hacer política de cuarta, para hacer campaña. Una nueva versión, mejorada, de pan y circo.
-Bueno, usted vio que en la Plaza de Mayo el peronismo hizo lo mismo.
-Y sí, si esto no tiene color político. Mire veía en televisión, en el noticiero, a algunos candidatos mostrando la cara y bailoteando mientras cantaba Gieco. Realmente me dio pena. Pena porque se aprovecha todo esto para hacer campaña. ¡Pero ojo! En esto están casi todos, como dije antes. Por eso yo valoro mucho más a aquellos dirigentes que guardan prudente silencio, que no ponen la cara innecesariamente, que tienen perfil bajo, que no dicen macanas con rostro serio y de filósofo de altillo, que trabajan en el anonimato. Prefiero a aquellos que en silencio invierten presupuesto para un plan de alfabetización, o que instalan una red de agua potable, obra que no se ve, pero que calma la sed de tantos sedientos de actitudes justas. Pero debemos reconocer que son muy pocos estos dirigentes.
-¡Pobre Belgrano!
-¡Pobre de nuestros hijos! Inocencio. Valéry decía que "el problema de nuestros tiempos es que el futuro ya no es lo que era". A mí me parece que, aclarando que siempre existieron los males, es cierto que en estos tiempos y en esta argentina de las últimas décadas la cosa está muy, pero muy degradada. -Pero mucha gente consume esta degradación, porque si no, Candi, se opondría a ella. ¿No le parece?
-No sé. A mí me parece que a muchos los tienen bajo trance hipnótico.
-En algunos casos puede ser, pero a otros seres humanos los han obligado a descender de nivel intelectual ¿Usted vio ese corto publicitario de un famoso vehículo en el que un mutante bueno, velludo y simpático es dejado en libertad? Bueno, yo me pregunto cuantos de esos "homo argentinus" andan dando vueltas, prisioneros de la ignorancia, confundidos. Efectos de un sistema que los hizo así, para que no molestaran con sus reflexiones.
Candi II
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"No podemos aparecer respaldando a un candidato que todavía no anunció si lo es"
Del Comité Provincial de la UCR
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Gritos argentinos en el Mundial
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La Ciudad
