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| domingo,
05 de
marzo de
2006 |
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¿Le hacen la guerra
desde un calabozo?
Todo parece indicar que la interna en la barra brava de Central recrudeció, y el episodio en el que balearon a Pillín Bracamonte, el viernes a la noche (ver la página 41), sería todo un indicio. No se trata ya de la añeja pelea de pillines contra chaperos y chaperitos, que los primeros ganaron por escándalo al punto de recluir a sus adversarios al más duro de los ostracismos, sino de Bracamonte y sus huestes contra un nuevo grupo. Al parecer la flamante pandilla respondería al liderazgo de un sujeto que por estos días está tras las rejas, acusado de delitos comunes, y que no es Paquito Ferreyra. Según cuentan quienes dicen estar al tanto de lo que acontece en las entrañas de la barra, el reo planea discutir la hegemonía de Pillín en las tribunas y hasta afirman que lo que pasó el día del partido contra Argentinos Juniors en el Gigante, cuando un grupo de barrabravas se pasó a la platea para intimidar y agredir a los socios e hinchas que en ese momento insultaban a la comisión directiva, es parte de las primeras escaramuzas entre ambos bandos. Por ahora es imposible atribuir el ataque a balazos contra Bracamonte a esta guerra incipiente, pero tampoco parece descabellado. Si la balacera fue parte de este nuevo contexto, ¿no es lógico dar por cierto que habrá venganza, no debería prevenir la policía para evitar una eventual escalada de violencia, no tendrían que tomar medidas las autoridades del club para evitar que las tribunas se conviertan en el escenario de nuevas batallas, como ya sucedió en el pasado? Quedan todos advertidos.
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No hay forma de
mejorar la terminal
Pese a los anuncios, la inversión y las estrategias para atraer más turistas a la ciudad, la terminal de ómnibus sigue teniendo un aspecto desagradable. "Parece la estación de una ciudad africana", se escuchó decir el viernes a un pasajero que, con notable acento centroamericano, tomaba un café en el bar central de la estación. Frente a él, y para corroborar su afirmación, dos perros vagabundos famélicos, sucios y heridos por batallas callejeras se acomodaron para dormir una siesta. La limpieza es de regular para bajo y las instalaciones, por más retoques que se le hagan, denuncian el paso del tiempo. ¿No será hora de construir una nueva estación de colectivos? |
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"Lamento que Rosario tenga este impuestazo"
Agustín Rossi
Diputado nacional; presidente del bloque kirchnerista
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