Messi: Sólo once minutos en la selección

Messi suma sólo 11 minutos y 40 segundos en el equipo de José Pekerman, en dos partidos (segundos contra Hungría y con poco tiempo para mostrarse ante Paraguay). Pero fue rutilante en el Mundial juvenil Sub 20 y hasta los paladares de los hinchas más exquisitos no necesitan tomarle pruebas. Nadie duda de sus condiciones. Y le cargan toda esa presión. A él parece no importarle mucho. Pone su mejor cara, responde con humildad y se concentra en lo importante: su relación con la pelota y sus compañeros de juego. "Es importante estar una vez más acá y poder compartir con el grupo", dice Lionel, con espíritu de equipo.

Eso sí, en las prácticas se transforma. Y aunque lo pongan de suplente se hace notar con su electrizante habilidad, esa maravillosa manía de ir siempre al frente, hasta que la pelota llegue a la red. Así lo logró tres veces en la práctica del jueves y Pekerman no se hizo el distraído. Al otro día lo probó de titular y es probable que mantenga esa idea para jugar hoy ante Perú.

Con esa mezcla de actitud dócil afuera e incontenible adentro de un campo de juego, Messi avanza en la consideración del técnico de la Selección y de todo el mundo.

El, con apariencia de inmutable, fija su horizonte en los partidos y en la oportunidad que seguramente tendrá en junio en Alemania. Hasta asegura haber aprendido de la injusta expulsión ante Hungría: "Si me hacen un foul, pido disculpas", tira, con una sonrisa cómplice. Y da su receta para abstraerse de las presiones y estar tranquilo: "Cuando entro a la cancha me olvido de todo. Así que puedo dejar de lado lo demás. Intento jugar y divertirme, que es lo más importante de todo".