El nivel de ingreso, la principal limitante

Las inmobiliarias tienen una óptica distinta a la de los bancos a la hora de analizar las transacciones que se generan a partir de los créditos hipotecarios. "Si bien las entidades bancarias destinaron fondos para hipotecas y las condiciones en las cuales se presta son mejores en relación a las de la década del noventa, ya que existe la posibilidad de tomar un crédito en pesos y a tasa fija, no se verifica un gran aumento de estos préstamos", opinó Alejandro Juri, de la Cámara de Inmobiliarias de Rosario.

Por el lado de las cifras pedidas, Juri arriesgó que "el incremento en el precio de los inmuebles obliga a solicitar un importante monto que los tomadores no se encuentran en condiciones de pedir en relación a sus ingresos". Y acotó que "los potenciales tomadores suelen tener ingresos sin recibos o sin desagregar de ganancias, esto frena la gestión, además los requisitos fijados por el BCRA son bastante difíciles", señaló.

Según explicó Juri, el mercado demanda en forma pareja departamentos usados y nuevos. Al tomar los clasificados de los domingos de La Capital, algo usual entre las empresas del sector, se verifica que la oferta mayoritaria es de edificios nuevos y en construcción.

En un recorrido por las unidades ofrecidas los números no son alentadores. Por una casa de tres dormitorios en el macrocentro se piden u$s75.000. por 100 metros cubiertos en la zona cercana la parque independencia u$s58.000. Por dos dormitorios en el centro u$s60.000. Los departamentos son los más volátiles. Un dormitorio en el macrocentro ronda los u$s25.000 y dos dormitorios los u$s32.000.

"Los usados son demandados por segmentos de gente que quiere cambiar su inmueble por uno mayor", describió Juri. En este segmento, "para departamentos de uno y dos dormitorios en la zona centro los precios oscilan entre $587 y $ 586 el metro cuadrado, respectivamente, pero es un valor con variaciones.

Suele darse que en el marco de una negociación se modifique el precio de la vivienda. "Esto pasa a menudo en estos días, hay propietarios que acuerdan un valor, el fin de semana lo evalúan y el lunes quieren más por su propiedad. Si bien es difícil de evitarlo, sugiero que los que compren no dejen pasar un fin de semana, que si llega la oportunidad lo hagan todo con un preacuerdo firmado y que operen con inmobiliarias reconocidas", aconsejó el empresario inmobiliario.