El gesto del primer mandatario apuntó a desactivar la reacción negativa de los mercados

Kirchner se reunió con Lavagna para relativizar los rumores de renuncia

El encuentro se tomó como una señal de apoyo pero el presidente no confirmó ni desmintió versiones

El ministro de Economía, Roberto Lavagna, pareció asegurarse ayer su continuidad al frente del Palacio de Hacienda luego de la reunión que mantuviera con el presidente Néstor Kirchner.

El encuentro con el jefe de Estado -complementado con otro posterior con el jefe de Gabinete, Alberto Fernández- fue interpretado como un intento oficial por ponerle punto final a la ola de rumores que en la última semana daban como posible el desplazamiento de Lavagna del Ministerio, a raíz del fracaso de concretar el canje de la deuda en el plazo previsto y sus discrepancias con el presidente del Banco Central, Martín Redrado.

Kirchner y Lavagna dialogaron ayer por la mañana en Casa de Gobierno, en lo que en ciertas esferas oficiales se interpretó como una renovada señal de apoyo del jefe del Estado hacia el ministro. Sin embargo, el propio presidente no quiso confirmar ni desmentir la ola de versiones cuando, al retirarse de un acto en la Universidad de La Matanza, rehusó responder a insistentes preguntas periodísticas sobre si estaba confirmado o no Lavagna en su puesto.

Sí acusó a "sectores empresarios que quieren castrar" el cambio que lleva adelante su gobierno, poniendo "palos en la rueda".

Las fuentes oficiales atribuyeron las versiones sobre supuestos choques entre el presidente y Lavagna a la acción de acreedores interesados en acorralar a la Argentina para que eleve su oferta en la renegociación de su deuda externa.

A algo de esto hizo referencia el propio Kirchner en Matanza, donde advirtió que los sectores neoliberales "no nos van a hacer retroceder no solo en la renegociación de la deuda, sino también en la recuperación de las instituciones".

El jueves por la noche, en tanto, había trascendido una comunicación telefónica de Kirchner con Lavagna, en la que supuestamente el jefe del Estado le renovó su apoyo al ministro y con ello restó fuerza a las versiones. En ese clima, el ministro concurrió a la Casa Rosada, donde permaneció aproximadamente dos horas y media.

Según se supo, Lavagna fue recibido durante breves minutos por Kirchner, con quien habría analizado el proceso del canje de deuda y otros temas "de rutina", y luego de que el jefe del Estado abandonara la sede gubernamental, rumbo a La Matanza, el ministro se reunió con Alberto Fernández. Lavagna se retiró finalmente a las 12.15, sin que se brindara información oficial sobre su visita.


El canje de deuda
En realidad, los rumores sobre un enrarecimiento en la no siempre fluida relación entre Kirchner y su ministro tomaron fuerza luego del fallido lanzamiento de la operatoria de canje de deuda en Estados Unidos, tras la caída del Bank of New York como agente colocador. Kirchner se enojó y achacó culpas a Lavagna, a quien por lo bajo habría acusado de no haber previsto una entidad de reserva ante la eventualidad de que, como efectivamente ocurrió, la declinación de ese banco demorara la marcha del proceso.

Es que el gobierno quería llegar a enero -la fecha prevista era el 17- con el proceso concluido, para poder retomar las negociaciones pendientes con el FMI por la revisión de las metas fiscales. Las autoridades del organismo, sobre todo su titular, el español Rodrigo Rato, ya advirtieron en reiteradas ocasiones que no se sentarán a la mesa hasta que no esté resuelto el canje con los acreedores privados.

El embajador argentino en Washington, José Bordón, reiteró ayer su confianza de que el proceso de la deuda llegará "a buen término", además de mostrarse "seguro" de la continuidad de Lavagna.

Enviados del Ministerio de Economía se encuentran en Nueva York negociando con el Bank of New York para que reconsidere la posibilidad de ponerse al frente de la colocación de los bonos, a la vez que también conversan con directivos de JP Morgan para tentarlos en la operación.

En tanto, el representante del gobierno ante la Unión Europea, Jorge Remes Lenicov, atribuyó los rumores al interés de los acreedores por desestabilizar al gobierno para obligarlo a mejorar la oferta de canje.

El ministro al salir de Casa de Gobierno.