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 sábado, 21 de agosto de 2004

Nuevo sistema. La oposición fustigó con dureza la cláusula de obligatoriedad
Satisfacción a medias en las filas del Partido Socialista
Celebraron la derogaciónde la ley de lemas, pero criticaron la imposición a los ciudadanos en las primarias

Javier Felcaro / La Capital

Los ánimos socialistas pendularon ayer de la satisfacción por la media sanción de la derogación de la ley de lemas, su añejo reclamo, al rechazo del nuevo sistema electoral con su cláusula que impone el voto obligatorio en las internas abiertas y simultáneas.

Antonio Bonfatti, jefe del bloque de diputados provinciales del Partido Socialista (PS), consideró positiva la derogación respaldada por 48 de los 50 integrantes de la Cámara baja, aunque -rápidamente- alimentó la controversia que ya se apoderó de la cláusula de obligatoriedad.

"No salda la deuda con la sociedad sino que la agrava, porque la participación ciudadana se debe dar en forma voluntaria", le dijo el legislador a La Capital. Tampoco dudó en estimar que el polémico inciso, la llave del acuerdo entre el justicialismo y el Partido del Progreso Social (PPS), "embarra aún más la situación"

De cara al debate de la semana próxima en el Senado, que deberá tratar el proyecto que elimina la ley que, desde 1990, estableció el cuestionado sistema de doble voto simultáneo, el socialista destacó que se abren "dos escenarios".

"Todo dependerá de la persistencia de ocho legisladores y del revuelto Gramajo", ironizó en alusión a los senadores dispuestos a votar por la iniciativa de su par peronista Joaquín Gramajo, quien propone comicios abiertos con doble sufragio acumulativo. Y desafió: "Me parece que no les será sencillo soportar el costo social de la demanda de derogación".

Luego, Bonfatti se detuvo en el anuncio del gobernador Jorge Obeid, quien, entonado por lo ocurrido en Diputados, salió a darle nuevo impulso a la reforma de la Constitución provincial.

"Lo primero que Obeid admite con sus dichos es que no se modifica la mayoría automática, con lo cual no cambia nada. Sigue con el planteo de (el ministro de Gobierno, Roberto) Rosúa: gobernar es tener mayoría. Pero hoy el punto es gobernar con consenso, como viene ocurriendo en Rosario desde hace 15 años", retrucó.

Para el diputado también es imprescindible avanzar con otras reformas, como un tribunal electoral independiente o la transparencia en el financiamiento de los partidos. "Son claves que no debemos abandonar", concluyó.


Las dudas
En sintonía, su par de bloque Sergio Liberati objetó la cláusula que incluye el flamante sistema: "No compartimos la obligatoriedad y tenemos dudas sobre su constitucionalidad. Para los partidos es importante que participen los no afiliados, pero aquellos con voluntad de hacerlo".

El diputado, además, tildó de "engorroso" el trámite de justificación que deberán realizar quienes no voten en la interna abierta. "Pese a que la ciudadanía toma positivamente la derogación, al nuevo sistema todavía no se lo conoce bien. Ni siquiera se sabe qué tipo de sanciones se aplicarán si alguien decide no ir a sufragar", afirmó.

Según Liberati, los senadores "no tendrán otra alternativa" que darle una sanción definitiva a la derogación de "una ley que se convirtió en un verdadero traje a medida del gobierno".

También recordó que el paso inicial en la Cámara baja se logró "porque la oposición, incluido nuestro bloque, votamos en sesiones anteriores la preferencia al mensaje del gobernador", oportunidad en la que el legislador había pronosticado "el principio del fin" de los lemas.

Al retomar las críticas a la cláusula de obligatoriedad, Liberati evaluó que "esta incorporación coercitiva" en la selección de candidatos perjudica a los partidos que carecen de estructura.

A modo de ejemplo, el diputado se refirió al conflicto con el que podrían llegar a enfrentarse las fuerzas minoritarias: "A los partidos que no tengan dos listas de postulantes igual se los obliga a presentarse a elecciones, con el costo que esto significa".

Otro integrante de la bancada del PS, Raúl Lamberto, celebró la media derogación de "una norma tramposa, un verdadero mal que los santafesinos debimos soportar durante 14 años", aunque fustigó el inciso de la discordia.

"Les están cargando a los ciudadanos un problema que se quiso evitar con la derogación de la ley de lemas, que los hacía participar en las internas. Ahora se los incorpora indirectamente con el voto obligatorio", explicó el legislador.


Desde Lima
Por su parte, en declaraciones radiales realizadas desde Lima (Perú), el ex intendente de Rosario Hermes Binner calificó lo ocurrido en Diputados como "un paso muy importante". Y auguró: "Esperemos que el Senado también escuche el clamor popular por un sistema electoral más transparente".

Si bien reconoció que "avanzamos significativamente", el ex candidato a gobernador por el socialismo se mostró disconforme con el nuevo sistema electoral en cuanto a la obligatoriedad del voto en las internas abiertas y simultáneas. Por eso prometió que el tema que divide las aguas (trabó durante horas el inicio de la sesión en la Cámara baja) "será discutido".

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