En busca de una jubilación digna

No son pocos los maestros que suman más de 30 años de trabajo en la docencia y que aspiran a retirarse de su trabajo frente al aula, pero que, sin embargo, no pueden todavía pensar en el beneficio de la jubilación. La razón es sencilla: de optar por la misma pasarían a cobrar mucho menos que su haber actual. Por ejemplo, un educador que cuenta con el 120 por ciento de antigüedad (el máximo) y cobra un salario de 700 pesos, si se jubilara pasaría a percibir unos 400 pesos.

El tema es crucial y ahora integra la agenda de discusiones entre la Ctera y el Gobierno Nacional. Al momento de la entrevista con el secretario general de la Ctera, Hugo Yasky -realizada el miércoles pasado- se esperaban definiciones con el Ministerio de Trabajo Nacional.

En rigor, se busca que se regule la norma en vigencia para que los maestros puedan retirarse con 30 años de servicio (a los 57 años las mujeres y a los 60 los hombres) y percibir una jubilación que resulte de promediar los tres mejores sueldos de los últimos tres años, más el 82 por ciento móvil.

Según anticiparon Yasky y el secretario de Relaciones Internacionales de la Ctera, Francisco Nenna, se espera la firma de un decreto que regularice esta situación y beneficie a miles de docentes.

"La norma busca un doble efecto: reivindicar la dignidad del docente, su derecho a jubilarse con una cifra digna y permitir el recambio, es decir, el ingreso a la docencia de nuevos docentes", indicó Nenna al respecto.

Según anticiparon los dirigentes gremiales, "las perspectivas son buenas" y se espera que se resuelva a favor de la demanda sindical y se comience con los cambios en materia previsional este mismo año.