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 domingo, 07 de noviembre de 2004  
Por actitud
Rugby: Jockey volvió a imponerse a La Tablada

Pablo F. Mihal / La Capital

No le sobró nada, pero le alcanzó con lo justo. Así podría resumirse cómo Jockey logró su primera victoria en la Zona 1 de este Nacional de Clubes 2004 al imponerse a La Tablada de Córdoba por 35 a 34, en un partido tan parejo como de resultado incierto hasta el final.

Por el torneo del Interior Jockey le había propinado una paliza y el de ayer se presentó para los cordobeses como una verdadera revancha. Fácticamente no fue igual ya que el partido entre verdiblancos y azulgranas fue tremendamente equilibrado, tanto en aciertos como en errores, y lo más importante fue que casi no tuvo interrupciones. De hecho, a lo largo de los 80 minutos sólo se cobraron 13 penales y un mark free kick. El resto fue jugar y jugar.

Al mal de ausencia que padeció, Jockey lo equilibró con actitud y si bien el trámite no le resultó para nada fácil pudo finalmente festejar, además de llevarse de yapa un punto bonus por haber hecho cuatro tries.

El ejemplo más claro de esto se dio sin dudas en la segunda línea. Ayer no estuvieron ninguna de las tres torres que tiene Jockey (los hermanos Carizza y Palou), sin embargo el verdiblanco suplió la cantidad de variantes en esa formación por la seguridad que le aportó Gonzalo Guiñazú a partir de su vasta experiencia. Y no fue poco, ya que el Pebete fue uno de los jugadores destacados del conjunto que dirigen Minoldo y Crexell.

Hubo además otras buenas producciones individuales que lograron cierto desequilibrio y que, a la postre, fueron decisivas. El Darda del Castillo volvió a mostrar algo de su magia; Vergallo, además de mucha combatividad, una explosión simplemente imparable; Quaglia y Silvetti, muchísima entrega (nunca dieron por perdida ninguna pelota) y los hermanos Spirandelli su hambre por el ingoal rival.

Más allá de estos ejemplos, el equipo en sí trabajó mejor en forma colectiva para superar a un conjunto cordobés muy ordenado y que vendió cara la derrota. Quizás el punto más flojo de los locales estuvo en el scrum y en el maul, donde La Tablada sacó una leve diferencia y en donde deberán trabajar bastante ya que los próximo rivales (SIC y CUBA) así lo exigen.

Pero cuando la pelota buscó aire los verdiblancos aparecieron en toda su magnitud, apoyando tries de muy buena factura, como el de Mario Spirandelli que capitalizó una muy buena jugada de los backs cuando promediaba el segundo período.

Un punto puede resultar insignificante para muchos o muy valioso para otros. Esto es según el cristal con que se mire. El de ayer, por el contexto y el rival, para Jockey fue un punto de oro porque no sólo le permitió arrancar con el pie derecho con un equipo diezmado sino que además lo reforzó en la creencia en sus propias fuerzas, que es lo más importante.
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Gonzalo Guiñazú fue una garantía en el line del Jockey Club.

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