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domingo,
21 de
octubre de
2007 |
El director, un ex suboficial
La Agrupación Policial Infantil de Rosario existe hace 23 años. El suboficial mayor retirado Juan Carlos Olmos la dirige hace 18 años. "Nosotros acá damos amor y respeto, nada militarizado, y sin discriminación", advierte el oficial.
"Nuestro lema es ayudar a la familia, a la escuela y a la entidad policial", explica para detallar cada área: "Ayudar a la familia para que no se pierda el respeto, ni el amor entre sus integrantes; a la escuela para que estudien, estudien y estudien. Y ayudar a la entidad policial dándoles clases de drogadicción, por ejemplo".
—¿Ese es el tema que más le preocupa?
—Para nosotros, sí. Porque la edad que tenemos acá... es la droga. El nene o la nena sale a la calle, se junta con chicos que están ahí drogándose, en cada barrio hay alguna esquina con chicos drogándose, entonces para mi ese es el peligro latente que hay para la niñez, la adolescencia y la juventud. La idea es retenerlos, porque ellos les van a decir a los otros lo que la droga les hace.
—¿Educación sexual les enseñan?
—No, hasta ahora... me prometieron que van a venir a hacer una charla.
—Pero el Día de la Lucha contra el Sida ustedes siempre van a la ceremonia de las mantas.
—Sí, siempre vamos a ese acto, porque al sida hay que respetarlo, no tenerle miedo, uno se tiene que acostumbrarse al sida.
—¿Y también toman el tema del delito?
—Sí, vienen comisarios y les hablan de lo que es un delito, y les dicen qué les puede pasar. Porque muchas veces decimos: “hay que hacer esto con los niños, o esto otro”, pero qué se hace, en concreto se hace muy poco. Usted fíjese todos los que trabajan con niños qué apoyo masivo tienen de los gobiernos.
—¿Usted trabajó en la calle?
—Sí, en la comisaría sexta, apenas entré estuve en batallón, entré en los 70, uno de los peores años, he vivido amenazado, no sé por qué, si por mis ideas políticas o por que era policía, pero gracias a Dios todo bien, he vivido esos tiempos muy malos para el pueblo argentino, que espero que nunca más pasen, los tiempos del Proceso. Yo he vivido con miedo, el personal civil ha vivido con miedo. Nosotros, lo mismo, el policía de verdad que se dedicaba a agarrar a los delincuentes, ha vivido con miedo, porque no sabíamos qué nos iba a pasar, y muchas veces sin tomar parte en nada, tanto por los guerrilleros o como por los militares, porque yo he sido siempre peronista, soy peronista y voy a morir peronista, justicialista y nacionalista (énfasis). Cómo podía vivir yo, porque nunca me oculté, la he pasado mal y en ese tiempo yo trabajaba en la calle, después pasé a la oficina y me tranquilicé.
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El líder. "Para mí son mis chicos", dice Juan Carlos Olmos.
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