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domingo,
21 de
octubre de
2007 |
“Quiero una explicación de enfermeras y directivos”
“Hago responsable al director del Hospital Centenario (Carlos Prada) y a las enfermeras de la sala 5 por el robo de mi beba. Me gustaría alguna explicación de ellos y a los que me acusaron de haber vendido a mi hija, nunca sabrán el dolor que se siente. Ellos se lavan las manos y no les importa nada”. Con estas palabras, María Peralta rompió el silencio en un diálogo exclusivo con La Capital, anoche un poco más aliviada y deseosa de festejar “el mejor Día de la Madre” junto a Selene en la sala de Neonatología del Policlínico Eva Perón, donde se encuentra internada.
Peralta se reencontró ayer con su recién nacida tras haber sido sustraída por una joven de 20 años que se la llevó de la propia sala del Centenario, pero al arrepentirse la restituyó. “La vi bien cuidada y no veo la hora de que me den el alta para irnos a casa”, comentó a este diario.
La mujer brindó su versión detallada de los hechos. “Avisé que iba a comprar pañales. Se lo dije a la enfermera de apellido Pérez, quien me respondió que fuera tranquila, que ella miraba a Selene. Hasta incluso me hizo una sugerencia de dónde comprar los pañales. Nunca salía sin avisar y muy pocas veces la dejaba sola, nunca me imaginé una cosa así. Fueron sólo cinco minutos”, relató para recordar: “Al volver no estaban ni mi hija ni la piba Jesica, que antes estaba en el box 3, en la cama de al lado diciendo que esperaba una persona”.
Sobre las versiones que la apuntaban como la vendedora de su propia hija, Peralta fue contundente: “Resulta ilógico que luego empiece a los gritos”, dijo para considerar que el Centenario “no tiene seguridad, porque prohíben entrar a la gente por fuera del horario de visita, pero alguien dice que es pariente y pasa sin problemas”. La mujer aguarda una explicación de las autoridades, pero anoche sonreía: “Esto es un regalo anticipado para el Día de la Madre”.
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