Fracasó el diálogo entre los repositores y La Serenísima

La empresa no acepta la intervención de la Secretaría de Trabajo. Sigue el desabastecimiento

Las negociaciones para que los repositores locales de la compañía láctea Mastellone dejen de pertenecer al convenio colectivo de Empleados de Comercio y sean encuadrados dentro del sindicato de la industria lechera (Atilra) volvieron ayer a fojas cero. Fue a raíz de que la empresa rechazó la competencia de la Secretaría de Trabajo provincial para dirimir el conflicto y no descartó ir a la Justicia. Ahora el gremio deberá responder a la impugnación.

   Los representantes sindicales no ocultaron su bronca por la postura de la empresa, que apunta a dilatar los plazos hasta el 20 de septiembre, fecha en la que se realizará en Buenos Aires un congreso nacional de Atilra, cuya conducción nacional tendría cerrado con las empresas lácteas la ratificación del convenio 10/97 o uno similar.

   Un acuerdo que es levemente mejor que el que rige para los repositores afiliados en mercantiles, pero sustancialmente inferior al convenio 2/88 en el que están encuadrados los repositores de la industria láctea en la región de Rosario.

   La diferencia no es sólo de remuneración, sino también de extensión de la jornada laboral (48 contra 44 horas) y también en materia de descanso dominical. “La postura de la empresa hoy demuestra que no tienen intenciones de negociar”, aseguró el secretario general de Atilra en la región, Víctor Vega.

   El dirigente señaló que mañana responderán a la impugnación de la empresa y aseguró que mantendrán la medida de fuerza que vienen sosteniendo desde hace un mes, por la cual no entran ni salen productos de La Serenísima de la distribuidora que tiene la compañía en la zona norte de la ciudad.

   Previo al encuentro, el responsable de prensa de la firma, Ernesto Arenaza, explicó a La Capital on line que “a nivel nacional tenemos casi 600 personas del sector comercial para reposiciones encuadrados bajo el convenio colectivo de trabajo 10/97 de Atilra y en Rosario específicamente es distinta ya que estos doce repositores quedaron bajo el sindicato de comercio porque pertenecen a Conser (Concesionarios La Serenísima), lo que ahora se está charlando con estos empleados es que se encuadren dentro del mismo convenio colectivo de trabajo (el 10/97) que firmó Mastellone a nivel nacional con Atilra”.

   Arenaza aclaró también que la intención de Mastellone es solucionar el conflicto cuanto antes por la importante pérdida de venta en el mercado rosarino, pese a que no pudo ofrecer datos económicos sobre la misma, aclarando sí que representa el “60% del mercado de leche fluida” de la ciudad. l

La semana pasada, los repositores de todas las empresas lácteas marcharon a la Secretaría de Trabajo. Ayer fracasó un acuerdo.