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domingo,
28 de
enero de
2007 |
Opciones para el alojamiento
Al norte de Fortaleza, en el Parque Nacional de Jericoacoara y en el corazón de un oasis en medio de dunas blancas, el Hotel Mosquito Blue, inspira los ojos del más exigente visitante. Esculpido en el paisaje con “la simplicidad sofisticada” de los Hoteles Mosquito Blue, recibe sus huéspedes con privacidad y clase en un ambiente de total estilo.
Localizado al pie de la famosa duna de la puesta de sol y a pocos pasos de los bares, restaurantes y tiendas del poblado, el hotel tiene fácil acceso a las playas y lagunas de agua dulce en las dunas.
El hotel se adapta armoniosamente en la exuberante vegetación del lugar: 4 estrellas y 80 cuartos y suites directamente en la playa, dos piscinas de diferentes diseños, un sauna, un spa con área de masaje abierto, un hidromasaje panorámico, bar y restaurante en la playa, son algunas de sus características. Desde los apartamentos se aprecia la vista espectacular de las dunas o la armonía del jardín ornamental.
El Hotel preserva la naturaleza contando con una estación de tratamiento de alcantarillados y energía solar. También fue construido sin cortar ningún árbol. Jericoacoara fue declarada por Washington Post una de las mejores playas del mundo y es considerada por los brasileños la mejor playa de Brasil. Este paraíso para románticos es también uno de los mejores lugares del mundo para windsurfistas.
Hotel Vila Gale-Fortalezza El grupo Vila Galé es uno de los principales grupos hoteleros nacionales y forma parte del ranking de las 250 mayores empresas hoteleras mundiales. Situado justo sobre la playa y sólo a 10 minutos de la avenida Beira-Mar.
En este hotel, inaugurado en octubre de 2001, no sólo se puede aprovechar todas las ventajas de una playa realmente paradisíaca y repleta de coqueros, sino también efectuar visitas al centro de la capital del estado de Ceará. Además de todas las ofertas para actividades de ocio y congresos del hotel, no hay que dejarse de fijar en la decoración, que pretende prestar un homenaje al indio brasileño, utilizando diversos materiales naturales como madera, cocos, piedras, rocas decorativas y esparto.
Posada La Dolce Vita Inaugurada el 30 de diciembre de 1998, la Posada La Dolce Vita está situada en la entrada de Canoa Quebrada, a dos pasos de la calle principal, Brodway, y a pocas decenas de metros de la playa más interesante de Canoa. Se extiende en un área de 2.500 metros cuadrados; por el momento cuenta con 10 bungalows ampliamente distanciados unos de otros, de varias capacidades El ambiente día y noche es en estilo rústico, con ladrillos en arcilla, ventiladores de techo y muebles de cipó (un tipo de vime, liana tropical encontrada sólo en esta región). Los bungalows están provistos de amplios baños azulejados con labatorios en granito y grifería italiana; ducha de agua caliente, no común en estos lugares.
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