Allegados a García Belsunce convocados para nueva pericia

Buenos Aires.- Nueve personas del entorno de María Marta García Belsunce fueron citadas para hoy en La Plata, donde se le extraerán muestras de sangre para comparar su ADN con el hallado en la escena del crimen de la mujer asesinada en el country Carmel de Pilar en octubre de 2002.

A pesar de la citación, por los dichos de los abogados de las personas que conforman el entorno, lo más probable es que la mayoría no concurra a la pericia. Se trata del hermano de la víctima, Horacio García Belsunce (h); sus medio hermanos John e Irene Hurtig; el marido de ésta y cuñado de María Marta, Guillermo Bártoli; los vecinos Sergio y Viviana Binielo y Nora Taylor; el vigilador Norberto Glenon; e Inés Dávalos, la esposa del vecino Nicolás Pachelo.

La medida fue solicitada por el grupo de fiscales de San Isidro designados para el juicio oral que se iniciará el 20 de febrero con el viudo Carlos Carrascosa como único imputado y que está integrado por Diego Molina Pico -instructor original de la causa-, Jorge Ariel Apolo, Diego Grau y John Boyad.


Pedidos de nulidad
Fuentes judiciales señalaron que varios de los abogados de las personas convocadas a la extracción de sangre presentaron pedidos de nulidad en el juzgado de Garantías número 1, a cargo de Ricardo Costa. Sin embargo, uno de los fiscales sostuvo que "la intención de esta medida es llegar a la verdad real del homicidio. Arribamos al juicio con un único imputado y una sola hipótesis. Queremos ir más allá. Pretendemos afirmar o descartar otras líneas investigativas", explicó.

En la casa de García Belsunce, los investigadores encontraron sangre de dos hombres y una mujer que no era María Marta y presumen que pertenece a las personas que la víctima llegó a lastimar antes de ser asesinada. Vale recordar al respecto que el ADN ya le dio negativo al viudo Carrascosa, a Pachelo y a otro vigilador, de apellido Ortiz, que fue sospechado oportunamente.

María Marta García Belsunce fue encontrada muerta el 27 de octubre de 2002 en el Carmel Country Club de Pilar y, pese a que la familia hizo pasar su muerte como un accidente doméstico en la bañera, un mes después, cuando se exhumó el cadáver, se comprobó que la socióloga había sido asesinada a balazos en la cabeza. (Télam)