Otra vez sin simulcasting

El hipódromo Independencia ha recibido una nueva bofetada de su similar de Palermo. Para la reunión de esta tarde, no figura en el "simulcasting" del viejo hipódromo Argentino, lo cual significa un perjuicio para el circo local y un desprestigio notorio, ya que por segunda vez desaparece de la consideración de los aficionados de todo el país que por distintos medios apuestan en las carreras palermitanas.

Las relaciones entre el Independencia y Palermo no habrían sido rescatadas por las autoridades municipales, sino que los contactos los siguen manteniendo las mismas personas que los hicieron en estos últimos años. El ansiado reordenamiento del turf rosarino no parece cercano. Se debería apostar a la seriedad, para luego aspirar a la bendición económica que podrían significar los slots u otro recurso proveniente de actividades lúdicas distintas al turf.

Mientras tanto, sería bueno intentar ofrecer un mejor espectáculo hípico, una transmisión televisada acorde al del siglo XXI y un mejoramiento imprescindible de todas las instalaciones del hipódromo.

Cuando se asiste a una batalla mediática en contra del simulcasting internacional, sería menester aclarar que estos hechos, en un turf universal de carácter serio y transmisiones impecables, no suceden. No por estar abiertamente a favor del simulcasting, sino en la creencia de que merecía un debate profundo a cargo de gente idónea.