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sábado,
21 de
octubre de
2006 |
Madre e hijo
detenidos por
el homicidio
de un changarín
Nueve meses después de que Claudio Esteban Ramírez muriera baleado en Lavalle y Amenábar, el 7 de enero pasado, la brigada de Homicidios detuvo ayer a dos personas. En una casa barrio Las Flores, ayer localizaron a una mujer de 39 años, quien fuera señalada como la instigadora del crimen. Y a su hijo de 16 años en una obra en construcción en jurisdicción de la seccional 4ª. Los vecinos de villa La Boca comentaron el día del crimen que una mujer y un menor, a los que identificaron por sus nombres, llegaron hasta el barrio. Y cuando Ramírez, que estaba en la casa de un familiar, apareció en escena, la mujer dictó su sentencia de muerte: "Ahí lo tenés. Matalo. El fue quien nos abandonó", le habría dicho al pibe que la acompañaba. El menor, hijo biológico de la víctima, disparó dos veces y el changarín cayó muerto.
La mujer detenida ayer por la mañana fue identificada como María Marta Maidana, de 39 años. Según los pesquisas, estaba aguantada en una casa de barrio Las Flores, en San Martín al fondo. Su hijo, de 16 años, fue apresado cuando salía de trabajar en una obra en construcción en jurisdicción de la seccional 4ª donde trabajaba como peón de albañil. De acuerdo a los investigadores, tras el homicidio, madre e hijo se ausentaron de la provincia. "Estuvieron un tiempo en Buenos Aires y otro en Entre Ríos", explicó un vocero. Maidana quedó detenida en la alcaidía de mujeres a disposición del juez de Instrucción Adolfo Prunotto Laborde. El menor, en cambio, fue alojado en la seccional 1ª.
Cuando Claudio Ramírez murió, sus vecinos y familiares contaron su historia. Claudio vivía en barrio Cabín 9 junto a su actual pareja y a dos hijos de 2 y 4 años. El sábado 7 de enero pasado fue a cenar a la casa de unos familiares en La Boca. Pero María Maidana se enteró y cerca de las 22.30, se llegó hasta el lugar. Llegó cuando Claudio regresaba de comprar algo para picar. Según los testimonios, lo cruzaron su ex mujer y el chico. La acusación indica que la madre le requirió que gatillara y su hijo acató. Ramírez recibió uno impacto en el tórax y otro en el cuello. Murió desangrado sobre la calle.
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