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sábado,
21 de
octubre de
2006 |
Programas de educación vial pensados para niños y jóvenes
El número creciente de accidentes de tránsito, como el de hace un par de semanas, donde murieron 12 personas, entre ellas 9 adolescentes que habían viajado desde Buenos Aires al Chaco para realizar tareas solidarias, ponen en debate, además de la seguridad en las rutas, cómo se implementa la educación vial; enseñanza que en la provincia es obligatoria en todas las escuelas, según la ley 11.686 desde 1999. Distintos programas educativos buscan concientizar a niños y jóvenes.
En todo el mundo, los jóvenes son las principales víctimas de accidentes de tránsito, lo cual obliga a la sociedad a pensar alternativas críticas para enfrentar este mal. En este sentido, la Municipalidad de Rosario desarrolla, a través del área de Educación de la Dirección General de Tránsito, distintos proyectos, entre ellos, el programa Transitando, dirigido a los estudiantes del polimodal, y que pretende prepararlos para obtener la futura licencia de conducir.
De acuerdo a los responsables del Area de Educación Vial municipal, “obtener la licencia de conducir es un derecho, pero este derecho se gana con responsabilidad y compromiso, para luego ejercer una convivencia segura y saludable. Es por eso que esta iniciativa, inédita en el país, comienza desde la etapa escolar a reflexionar con los jóvenes acerca la responsabilidad por la propia vida y la de los demás y la importancia de respetar la norma como prevención, aún antes de que ellos mismos hayan pensado en tramitar su licencia”.
El programa Transitando comenzó a funcionar en mayo de este año, a partir de la firma de un convenio entre la Municipalidad y la Universidad Nacional de Rosario, mediante el cual se capacita a los adolescentes para que en el futuro puedan obtener su licencia de conducir habiendo cumplido uno de los principales requisitos como es la realización del curso y examen teórico. Por eso esta instancia de formación y educación vial está destinada a los alumnos que estén cursando el tercer año de polimodal, luego del cual podrán seguir con el trámite habitual en la Dirección de Tránsito. En lo que va del año, ya más de 1.000 alumnos de diferentes colegios participaron de este programa.
Según indican los expertos, “los accidentes de tránsito se asocian con una compleja articulación de factores de tipo psicológico, social, cultural y familiar, que llevan al adolescente a asumir conductas que atentan contra su salud y ponen en riesgo su vida”, de allí que este programa busca concientizarlos.
La propuesta se basa en un curso teórico que realizan en forma obligatoria, donde se debate sobre temas que tienen que ver con el tránsito. “El objetivo es reflexionar conjuntamente jóvenes y educadores viales sobre las normas de tránsito vigentes en nuestra ciudad y la importancia de respetarlas para no sufrir consecuencias indeseables”, aseguran desde el Area de Educación Vial, a cargo de Lía Latorre.
El curso es de carácter opcional para los interesados, y debe ser acreditado a través del examen correspondiente y de un proyecto realizado por los propios alumnos, donde se muestren lo que se aprendió sobre la problemática a toda la institución y se cumpla así con la función de agentes multiplicadores. Luego de esto se extiende un certificado, el cual dará por cumplido el curso teórico para la obtención de la licencia de conducir.
Los adolescentes cuentan con un plazo para gestionar su licencia, que debe hacerse dentro de los seis meses siguientes a la fecha en que cumpla los 18 años o antes de transcurrido el año desde la aprobación del examen teórico, para no tener que revalidar el examen teórico en Tránsito. Los jóvenes que pasan por este programa no están exentos de cumplir con los demás requisitos exigidos y aprobar los exámenes psicofísico y práctico obligatorios.
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